Las bolsas europeas acentuaron ayer sus caídas y perdieron hasta 3,4%, mientras los índices asiáticos retrocedieron 1% y los bancos estatales chinos liquidaron dólares en nombre del banco
Las bolsas globales ampliaron ayer las ventas frente a la sesión anterior en una jornada en la que una segunda devaluación de la moneda china pesaba sobre los mercados globales y afectaba a los exportadores europeos. Los principales índices del Viejo Continente cedieron hasta 3%, a poco del cierre de sesión, y en Wall Street sus principales acciones ceden más de 1%.
El yuan  tocó un mínimo en cuatro años, cayendo por segundo día consecutivo después de que las autoridades lo devaluaran en una acción que desató el temor a una guerra global de divisas y acusaciones de que Pekín está dando una ventaja injusta a sus exportadores.
La devaluación del yuan repercutió en los fabricantes de automóviles y en los mercados europeos de lujo, dado que China es uno de sus principales mercados de exportación.
También pesaba sobre los valores energéticos y mineros ya que el país asiático es uno de los principales consumidores mundiales de materias primas.
En este contexto, los bancos estatales chinos vendieron dólares en nombre del banco central para mantener al yuan cotizando alrededor de los 6,43 dólares, dijeron operadores de divisas en Shanghai