En un intento de «apurar» nuevas señales de los líderes nacionales del espacio, el Frente Amplio-UNEN bonaerense ratificó ayer su condición de coalición «de centroizquierda» y rechazó cualquier acercamiento a Mauricio Macri o Sergio Massa para las elecciones del año que viene.   

«Dirigentes que hace muy poco formaron parte de altas responsabilidades del oficialismo y convalidaron todas sus políticas, y los que pretenden para la Argentina las mismas concepciones que imperaron en nuestro país en la década del 90 no pueden ser parte del proyecto político al que estamos convocando», dice el párrafo central del documento que el FAU provincial firmó ayer, tras un encuentro de sus principales referentes en Burzaco. Las alusiones a Massa, primero, y a Macri, después, son evidentes. De hecho, en una primera versión del documento se mencionaba al Frente Renovador y a Pro, pero luego, para «terminar de lograr consenso», se evitaron las referencias directas.

El escrito también alude al devenir del FAU nacional y, en particular, la tensión entre la estrategia para la pelea presidencial y las alianzas, tanto con Pro como con el massismo, para competir en las provincias.

«Es imperioso saldar discusiones que no contribuyen al fortalecimiento del espacio desdibujando su identidad», advierte el documento.

El llamado es un intento del FAU local por hacer valer el peso de la provincia (que concentra el 38% del padrón) y, desde esa preeminencia, presionar para que se «despeje» el panorama nacional. El pedido llega días después de que el espacio sufriera un nuevo sacudón por el acercamiento de varios de sus candidatos a gobernador, todos radicales, a Massa. Pretenden que las diferencias se salden lo más rápido posible y lejos de los medios.

En el camping de ATE de Burzaco estuvieron presentes Ricardo Alfonsín y Alejandro Armendáriz (UCR), Ricardo Cuccovillo (PS), Gerardo Milman (GEN), Mario Cafiero (Proyecto Sur) y Horacio Piedemonte (Coalición Cívica), entre otros. No hablaron de candidaturas, pese a que la falta de una figura fuerte para pelear por la gobernación bonaerense es uno de los principales déficit del FAU. El lote de precandidatos es amplio, aunque sin caras con peso propio. Incluye a los radicales Héctor «Cachi» Gutiérrez y Miguel Bazze; a Milman y Omar Duclós (GEN), a Cafiero y a Jorge Ceballos, (Movimiento Social por la República).

Por Lucrecia Bullrich  | LA NACION