El fondo rotatorio, administrado por el  IDR, brinda asistencia financiera mediante microcréditos a pequeños productores frutícolas, con el fin de mitigar la incidencia de plagas como carpocapsa y grafolita en todo el territorio provincial.

A los diez créditos entregados se suman otras 20 solicitudes que los técnicos del organismo están analizando para monetizar en breve.

El trabajo minucioso y sistemático que el IDR realiza con los pequeños productores se ve reflejado en el interés por volver a utilizar la herramienta de financiamiento para la campaña 2018.

El objetivo de la operatoria es el desarrollo competitivo de productores frutícolas, para promover la calidad de la producción a través del mejoramiento continuo de la sanidad de cultivos frutales de carozo y pepita.

Para acceder al beneficio, los productores tienen que poseer los registros correspondientes en AFIP, ATM y RUT, integrar preferentemente el Sistema de Mitigación de Riesgos (SMR) administrado por el Iscamen, colaborar con la generación de información por parte de técnicos de IDR e Iscamen y encontrarse en situación de cumplimiento de sus obligaciones.

Los componentes financiables son compras de agroquímicos, trampas de monitoreo, difusores de confusión sexual y otras metodologías que el Iscamen considere aplicables para obtener los objetivos.

El monto de financiamiento es de $ 6 mil por hectárea cultivada, sin interés, con un plazo de devolución de hasta 12 meses, con seis de gracia.