El viernes 17 de febrero de 2014, San Antonio perdió contra Portland 109 a 100. Jugó un muy mal último cuarto, en el que cayó por diez puntos y resignó la victoria. Emanuel Ginóbili, sin embargo, jugó esa noche uno de sus mejores partidos de la temporada y, de hecho, logró la máxima anotación de esa campaña: 29 puntos, 18 de forma consecutiva en el tercer cuarto. Terry Stotts, el entrenador de los Trail Blazers, reconoció lo hecho por el argentino: “Ha hecho cosas como esas durante tanto tiempo… Fue un Manu de época”. Sí, ya hace cuatro años e incluso en un campeonato que los Spurs terminarían ganando, Ginóbili era viejo y tenía actuaciones de otra época. Los que no pasan de moda son los elogios, propios y rivales.

El domingo 7 de enero de 2018 -es decir, casi cuatro años después de aquel partido-, San Antonio visita al mismo rival. Pierde, a cinco minutos y medio del cierre, 101 a 94. Pero aparece Ginóbili,ahora con 40 años, para anotar tres triples en 180 segundos y poner a su equipo tres puntos arriba. Y quienes manejan la cuenta oficial de Twitter del conjunto local, lejos de desesperarse, se rinden ante la evidencia. Le escriben a la cuenta del contrincante porque los asalta la duda, como suele pasar por estas tierras cuando las selecciones juveniles juegan ante combinados africanos: “@Spurs, ¿este tipo tiene 40?”.

Ginóbili, que terminó el juego con los Trail Blazers con 26 tantos (máxima del actual certamen), se convierte en el 5° que anota al menos 25 puntos con más de 40, junto a Michael Jordan, Kareem Abdul-Jabbar, Robert Parish y John Stockton. Promedia 21 minutos por juego en esta campaña, con 9,4 puntos, 2,3 rebotes y 2,4 asistencias.

Los NBA que pasaron el umbral de los 40 no son demasiados.Hay 27 jugadores que, con cuatro décadas encima, siguieron jugando en la liga. Si se cuentan sólo aquellos que llegaron a jugar con más de los 40 años y 164 días que tiene Manu hoy, son sólo 16 y mañana serán 15, porque el bahiense superará a Kurt Thomas. Incluso podrían contarse 14 si se quita al más viejo de la historia (Nat Hickey), que jugó con casi 46 años dos partidos luego de estar retirado por varias temporadas. Por eso se va tornando habitual que, con cada gran actuación, Ginóbili establezca algún récord, cuando no varios. Pero más que por los números, lo suyo trasciende por la vigencia y las formas.

De esos 14 hombres, varios apenas participaban de los partidos de sus equipos. Con la mitad de la temporada recorrida (42 de 81 partidos, contando el de anoche), Ginóbili ya jugó más que James Edwards, Grant Hill, John Long, Rick Mahorn, Charles Jones, Herb Williams y Bob Cousy en las campañas de estos a a sus 40 años.

Sólo seis de los basquetbolistas que pisaron los parquets de la NBA con más edad que el argentino llegaron al Salón de la Fama: Karl Malone, Stockton, Cousy, Abdul-Jabbar, Dikembe Mutombo y Parish. Manu, con cuatro anillos y parte de uno de los equipos más exitosos de la historia, tiene su lugar garantizado en el futuro. Y está más que justificado, por historia pero también por permanencia. Cousy, que entra en el listado porque volvió del retiro a los 41 años, apenas jugó siete partidos; Mutombo promedió 17 minutos pero apenas aportó 3 puntos y 6 rebotes por juego. El resto, sólo cuatro jugadores, continuó siendo determinante con mayor o menor cantidad de tiempo en cancha. El círculo de privilegiados se reduce y el mejor argentino de la historia sigue en él.

Hay, entonces, pesos pesados con los que puede compararse. Sin embargo se sigue viendo en estos días que el 20 Spur se convierte en “el único” con tal logro, o “uno de los” con tal otro. Los récords, al cabo, van de la mano con una vigencia y una preponderancia en el equipo que lo pone a la altura de los más grandes de la historia.