El camino de integración entre la Alianza del Pacífico y la Argentina se ampliará no sólo a las cuestiones comerciales, sino también en materia turística. El grupo se asociará a la Argentina y saldrá en forma conjunta al mundo para hacer una oferta regional de turismo.

La estrategia, promovida principalmente por México , se pondrá en práctica en el segundo semestre del año, durante una feria internacional que tendrá lugar en China y donde los países exponen sus atractivos turísticos. Se cree que al presentarse como un grupo amplio se podrá pisar más fuerte y generar mayor tráfico externo hacia la región.

La iniciativa se acordó entre el secretario de Turismo de México, Enrique de la Madrid Cordero, y el ministro de Turismo argentino, Gustavo Santos, en Buenos Aires, hace unos diez días, al mismo tiempo que se llevaban a cabo las reuniones entre los cancilleres de los países que comprenden la Alianza del Pacífico (México, Colombia, Chile y Perú) y el Mercosur en las que acordaron profundizar la integración comercial y liberar el comercio regional.

«La decisión, que es una manera concreta de ir acercando nuestros países, permitirá atraer más gente a la región. América latina tiene que ser una decisión de viaje prioritaria para el turista», dijo Cordero a LA NACIÓN.

Además de sumar a la Argentina a las ferias, también se acordó regionalizar el programa mexicano Pueblos Mágicos y potenciar, además, el turismo interno.

Ese primer punto fue parte de la conversación entre Santos y Cordero y ya tiene apoyo del Banco Mundial. Se trata de aplicar en la Argentina una iniciativa que funciona desde hace años en México, que consiste en un apoyo estatal a pueblos del interior que no tengan un alto flujo de visitantes, pero que cuenten con potencial turístico, ya sea gastronómico o histórico. En esos casos, se les brinda un reconocimiento financiero para mejorar la infraestructura y las fachadas deterioradas para embellecerlos. El objetivo también será presentar a Pueblos Mágicos como un «producto regional».

En el segundo caso, más ligado a la relación bilateral entre México y la Argentina, se estudia aumentar la frecuencia de vuelos entre ambos países para hacer lugar a la creciente demanda. Sólo el año pasado aumentó un 22% el número de argentinos que viajaron a México en relación con 2015. Se buscará que ese aumento también sea a la inversa, pues el número de mexicanos que visitan nuestro país es mucho menor. Por ahora se esperan los resultados de la campaña que la Argentina hace en el exterior sobre la devolución del 21% del IVA a los turistas extranjeros. «La Argentina se está volviendo un país muy relevante en materia turística», dijo Cordero.

El funcionario mexicano asemejó la relevancia de los acuerdos turísticos con los otros entendimientos comerciales entre nuestro país y las naciones que integran la Alianza del Pacífico, como el que se logró con Colombia hace unos diez días en materia automotriz. Según anunció el ministro de Producción, Francisco Cabrera, la Argentina exportará hasta 42.000 automóviles por año a Colombia, lo que representaría unos US$ 700 millones en cuatro años.

Los acuerdos con México no se limitan al turismo, sino que ambos países también buscan explotar aspectos comerciales, que han estado en su peor momento en los últimos años. Según datos de la Secretaría de Economía de México, en 2016 se exportaron a la Argentina US$ 1409 millones en bienes y servicios y se importaron US$ 897 millones, lo que da como resultado un superávit de US$ 512 millones para México. Si se lo compara con el vínculo comercial que ese país tiene con Estados Unidos, los números son ínfimos. En 2016, México importó y exportó a Washington US$ 230.959 millones y US$ 294.151 millones, respectivamente.

Las condiciones están dadas para hacer que esos números bajos crezcan. Ya hay conversaciones entre los dos gobiernos para impulsar las exportaciones de maíz argentino, por ejemplo. En línea con su estrategia de mirar más a América latina y menos a EE.UU. tras la asunción de Donald Trump, México compraría menos cantidad de esos granos al país norteamericano.

Incluso, esta semana habrá nuevas reuniones entre ambos países en el Palacio San Martín para «profundizar» el acuerdo de cooperación económica.

Además de las negociaciones para que la Argentina se convierta en un miembro pleno de la Alianza del Pacífico -hoy es observador-, también avanza el diálogo de equipos técnicos para firmar un tratado de libre comercio bilateral entre México y nuestro país, que se iniciaron el año pasado, poco antes de la visita oficial de Enrique Peña Nieto .

«La relación entre la Argentina y México tiene que pasar de ser un vínculo diplomáticamente bueno a uno económicamente útil», señaló Cordero. Según el funcionario, el gobierno de Mauricio Macri brindó al mundo señales de credibilidad que tendrán resultados con este tipo de acercamientos. «Es un paso indispensable para que a partir de ahí vengan la inversión y el comercio. Cuando llevas muchos años de ser impredecible, no porque salgas al mundo a decir «soy previsible» te van a creer», ejemplificó. Y agregó: «Hay que establecer reglas claras para generar confianza. Aunque el presidente lo diga, lleva tiempo».