Es una investigación que lleva casi dos años -comenzó en 2015- con 22 kilos de cocaína secuestrados y cinco personas detenidas. Ayer cayeron familiares de quienes ya estaban presos. También hallaron armas de fuego.
A partir de la detención de cinco personas con 22 kilos de cocaína ocurrida en diciembre de 2015, la Policía logró dar con el resto de la banda que se dedicaba a traer la droga desde provincias del Noroeste argentino para después enviarla a Chile por medio de «mulas».
Con esas personas detenidas a fines de 2015, la gente de Narcocriminalidad posó sus ojos en varios familiares de los presos y notó que el modo de vida que llevaban no se condecía con sus ingresos; para eso se cruzaron datos de la Afip de los investigados.
Al operativo realizado ayer los efectivos lo bautizaron «San Patricio», porque se dio en coincidencia con el día del santo irlandés.
El megaoperativo incluyó varios allanamientos en zonas del Gran Mendoza y permitió secuestrar cerca de un millón de pesos en efectivo, varios vehículos -algunos de alta gama- y 40 kilos de hojas de coca. Además, cuatro personas quedaron detenidas, «todas ellas de nacionalidad argentina», como explicaron desde la fuerza en una conferencia de prensa.
Estos decomisos se enmarcan en un larga investigación que comenzó más de un año y medio. En diciembre de 2015, la Dirección General de Lucha contra el Narcotráfico secuestró 22 kilos de cocaína que estaban en poder de una banda narco internacional. (ver aparte)
El modus operandi de esta organización consistía en ingresar al país la droga desde Bolivia, trasladarla a Mendoza y luego cruzarla a Chile mediante transporte humano, conocido como «mulas». En aquella oportunidad cinco personas, cuatro bolivianos y un argentino fueron aprehendidos. Hay que aclarar que esta droga -como la marihuana- duplica su precio cuando ingresa al país vecino.
Tras el golpe a la gavilla de 2015, los investigadores se centraron en los bienes de familiares de los apresados, lo que terminó en los operativos de ayer.
Allanamientos
Los efectivos ingresaron a once viviendas de Maipú, Las Heras, Ciudad y Guaymallén, según detallaron fuentes policiales.
De acuerdo con los datos preliminares, la suma de los secuestros ascienda a 985.000 pesos en efectivo (también hallaron una buena cantidad de dólares), ocho vehículos (entre los que se encuentran camionetas Hilux, Amarok, Partner y un auto Ford Focus), dos armas de fuego, cuatro detenidos y 40 kilos de hojas de coca.
Hacia la tarde de ayer, en la base Cóndor, el ministro de Seguridad, Gianni Venier; el director de Policía, Roberto Munives, y el jefe de Lucha contra el Narcotráfico, comisario Walter Cabrera, ofrecieron una conferencia de prensa para dar detalles de los operativos.
Venier indicó que la intervención de la fiscalía federal a cargo del fiscal Fernando Alcaraz, más lo hecho por el personal de Aduana y Afip, «fue fundamental para lograr estas detenciones».
El funcionario dijo también que lo hecho hasta ahora «es parte de la pesquisa, que no está terminada».
Del mismo modo, y para terminar, informó que el valor de los vehículos incautados «asciende a los cuatro millones de pesos».
Antecedente de 2015
En el operativo de 2015 se secuestraron más de 22 kilos de cocaína, tres camionetas, un revólver calibre 22, 80 celulares y $ 50 mil.
Además quedaron detenidas cinco personas: tres hombres bolivianos, una mujer de la misma nacionalidad y un argentino.
La Dirección de Lucha contra el Narcotráfico comenzó a investigar cinco meses antes de las detenciones. El procedimiento fue considerado como uno de los más grandes de los últimos años.
El modus operandi de la organización consistía en ingresar al país la droga desde Bolivia, trasladarla a Mendoza y luego cruzarla a Chile mediante «mulas».
El responsable de la maniobra había viajado a Bolivia, «con intenciones de proveerse de la droga y regresar, por lo que se dispusieron controles en los ingresos de nuestra provincia», informo la Policía.
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