Se trata de una suba de corto plazo que dura el día de la tormenta y entre dos y tres jornadas posteriores. Luego, los valores vuelven adonde estaban.
Según Omar Carrasco, de la Unión Frutihortícola Argentina, esta tendencia se da durante los días de lluvia y algunos posteriores al evento. Así, los precios “suben y bajan” en unos pocos días, recuperando su valor original.
Los verduleros consultados por Los Andes, revelaron que las constantes lluvias generan inestabilidad en los precios ya que muchas de las cosechas son vulnerables frente a situaciones de este tipo. Cuando ocurre esto, los productores aumentan su mercancía para no tener pérdidas por las cosechas, que se pueden llegar a podrir.
“Hay que tener en cuenta que los comerciantes tampoco pueden subir tanto sus precios, debido a que la situación del sector no es la mejor”, comentó Carrasco quien agregó que se vende poco debido a que hay “bajo circulante y la mayoría de la verdura de producción local tiene precio bajísimo”.
El dirigente explicó que el problema surge cuando llueve ya que por tres días no se puede pisar la chacra. El otro tema es que luego de las lluvias, el intenso sol sobre las plantas quema las hojas, por lo cual no sirven para la venta. Entonces, y ante la escasez de oferta, la producción existente sube su precio.
Al recorrer distintas verdulerías, las personas consultadas dicen que debido a las lluvias, los precios se incrementan de una manera considerable pero descienden volviendo a su importe anterior. En general, coinciden en que cuando la lluvia cae en la provincia los precios de las hortalizas suben.
Esto ocurrió la semana pasada con verduras como la acelga que se vende por paquete y en algunos negocios subió de $ 5 a $ 15; el kilo de lechuga que aumentó de $ 15 a $ 28, por mencionar algunas subas que se produjeron por estos días en los sitios consultados. Hay que tener en cuenta que cada verdulería maneja precios diferentes en función, especialmente, de la zona donde está ubicada.
“La humedad no es buena para la mercadería y los precios se han incrementado en ese momento porque no se puede retirar del campo la mercadería, la oferta se achica y, entonces, tienden a subir los precios. Casi todos los productores locales incrementaron sus valores”, precisó Roberto desde un local de calle Montevideo.
Asimismo, explicó que semanas anteriores mermó el ingreso de las hortalizas tras las lluvias en las zonas productoras que impidieron la cosecha normal.
En una verdulería ubicada en el interior del Mercadito Santa Ana de calle 9 de Julio y Rivadavia de ciudad, explicaron que los precios suben con las lluvias y luego se normalizan. Allí se puede conseguir el kilo de lechuga a $ 20; el paquete de acelga $ 5 , la espinaca a $ 10 el kilo, mientras que el kilo de cebolla está a $ 30, por mencionar los valores de los productos que más impacto tienen en esta época.
Laura Rinaudo, empleada de una verdulería lujanina, agregó que la papa mendocina fue uno de los productos que sufrieron las consecuencias de las tormentas y que debido a esto su costo impactó de lleno en los locales del rubro.
“El kilo de papa ahora está en $ 15 por lo menos en nuestro comercio. La semana pasada no teníamos calidad en esta hortaliza, por las tormentas. Según lo informado por los productores, las excesivas lluvias provocaron que los sembradíos del tubérculo se pudrieran antes de que el producto estuviera listo. Es la verdura que más consumen los mendocinos”, opinó la mujer.
Algunos comerciantes como Pedro Tolosa del departamento de Godoy Cruz, creen que lo mejor para no perder clientela es no aumentar precios porque, si no, los clientes compran poco o se vuelcan a otras verdulerías de la zona.
“La gente se queja por lo caros que están los productos, pero no somos los culpables. Así como se retrasa la llegada de los mismos por las lluvias, de igual forma se incrementa el valor de cada uno”, comentó Tolosa.
Por otra parte, Carrasco recomendó comprar en comercios del rubro de barrio y no en supermercados donde los precios de frutas y verduras superan en 100% a los valores de las verdulerías. “En los supermercados, los productos han sido manoseados varias veces antes de llegar al consumidor”, agregó Carrasco quien reconoció, no obstante, que muchos prefieren esa boca debido a la posibilidad de pagar con tarjeta y en cuotas.
Daños por granizo en Las Catitas y La Domida
La madrugada del jueves se produjo una nueva tormenta de granizo que afectó distintas zonas de la provincia, provocando importantes daños en campos cultivados de los distritos de Las Catitas y La Dormida (Santa Rosa).
Desde Contingencias Climáticas, Marcos Scipioni informó que recorrieron distintas áreas para observar el grado de inconvenientes ocasionados por este fenómeno climático. De acuerdo con la información aportada por el funcionario, alrededor de 300 hectáreas de vid y ciruela se vieron afectadas por la piedra que cayó ayer.
“Hemos tenido ayer más de 60 núcleos de tormentas en toda la provincia. Lo más importante que se produjo a nivel de daño en la provincia fue en el distrito de Las Catitas y algo de La Dormida. También tuvimos granizo en Luján, Godoy Cruz, Carrodilla, Chacras de Coria y San Rafael, donde el impacto fue menor”, explicó Scipioni.
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