No fue un Coloquio más. El on the record le ganó al off. El récord de más de 1000 asistentes se complementó con algo que no se dio en los últimos 10 años. El futuro presidente de la Argentina participó de la reunión más importante del establishment local que, como todos los años le cambió la cara a Mar del Plata, esta vez en una fría primavera. La apuesta es ahora para la edición 52.
Quizá una anécdota ilustre el cambio de humor de los asistentes y de los organizadores del Coloquio. María Eugenia Estenssoro hablaba sobre el ego de los empresarios. Aludió entonces a Juan José Aranguren, el ex presidente de Shell que durante años se enfrentó al Gobierno. «Ahora lo escuchamos y lo idolatramos. Pero lo traemos ahora, en el fin de ciclo. Antes estuvo solo», dijo. Los tiempos han cambiado.
Después del domingo 25 empezará la cuenta regresiva para la organización del próximo Coloquio, pero también para romper la racha que impuso Néstor Kirchner, en la que ni el presidente ni su ministro de Economía asistían. De hecho, el único que no respetó la consigna del frente kirchnerista fue Daniel Scioli, quien, en su rol de gobernador, fue una figura protagónica en las aperturas.
El plan de gobierno que los empresarios tienen en la cabeza recorre varios ejes bien marcados. Desde el punto de vista económico, el foco está en convertir las expectativas en realidad. La última encuesta realizada por D’Alessio Irol entre 178 ejecutivos prevé para 2016 un crecimiento de las ventas, las exportaciones y la inversión, pero no habrá una fuerte creación de empleo. Cansados de estar en busca del punto de rentabilidad perdido, quieren tener un rol más protagónico desde el 11 de diciembre.
Sin embargo, lejos están de no ofrecer la «fórmula» para Silvina Batakis si gana Scioli o para Rogelio Frigerio o Adolfo Prat-Gay, en un eventual mandato de Mauricio Macri. A continuación las prioridades que marcan los hombres de negocios.
Promocionar las inversiones. Para ello sostienen que es clave eliminar impuestos distorsivos, clarificar las reglas de juego y sobre todo, encarar una reforma impositiva. Juan Llach, director del Programa de Gobierno del IAE, habló del asunto. «Es necesario devolver a las provincias su poder tributario, ya que genera más inseguridad alimentaria y aumento de la pobreza», dijo. Luis Miguel Etchevehere, presidente de la Sociedad Rural, también fue asertivo: «Las economías regionales se mueren por la enorme presión impositiva», resumió.
Cambiar el perfil del Estado. El peso del aparato público, que duplicó su tamaño respecto del PBI en los últimos 12 años, fue otro eje. No sólo por lo que significa desde el punto de vista de vista del gasto público, sino también por la vocación reguladora. De hecho, el jueves a la mañana, en el primer piso del Hotel Sheraton una mesa convocaba a representantes de Coca-Cola, Mondelez, Arcor y Molinos. Hablaban sobre una regulación que ese día se había publicado en el Boletín Oficial. A partir del viernes, debían someter toda la publicidad que emitieran a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) para que sea aprobada. La burocracia crece. «Necesitamos un Estado fuerte y ágil, pero no omnipresente. Un Estado que tenga los recursos para llevar adelante sus funciones, pero que no ahogue ni pretenda reemplazar a la actividad privada», resumió Ignacio Stegmann, titular de 3M y presidente del Coloquio.
Recuperar las reservas. A nadie le escapa el tema de los activos que quedarán en el Banco Central el 10 de diciembre. El candidato por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, fue el primero en hablar de ellos. «No va a haber problemas por falta de dólares», dijo. En las mesas no eran pocos los que desconfiaban de la frase asertiva del gobernador. «Los dólares para la industria son clave y por ello las reservas deben ser la prioridad», dijo Isela Costantini, presidente de Adefa (entidad que agrupa a las terminales automotrices) y de General Motors.
Hernán Lacunza, economista de Cambiemos y ex gerente general del Banco Ciudad, no dejó dudas sobre la importancia: «Las reservas son el equivalente a un cheque sin fondos. Llevan la firma pero no tienen respaldo». Y Rogelio Frigerio, uno de los hombres que más escucha Macri en materia económica, contó en un almuerzo que los valores actuales de reservas líquidas están en US$ 4500 millones. «Menos de la mitad de las que tenía Kirchner cuando asumió», remarcó.
Resolver la inflación. «Miguel Kiguel, economista de Econviews, contaba en su presentación que las inflaciones de alrededor de 30% son las más difíciles de bajar. «La inflación debe ser incorporada a la agenda y resuelta por el mal que genera», sostuvo Cristiano Rattazzi, titular de Fiat Chrysler Automóviles (FCA). ¿Cuáles son las recetas de las que hablan? El objetivo de los directivos, en este caso, pasa por arrancar con metas a cumplir, algo que históricamente ocurría. Controlar el gasto público de manera de recuperar el superávit fiscal perdido y avanzar en una transformación del Indec que le devuelva el brillo que alguna vez supo tener. Aquí no hay ansiedades. Nadie espera soluciones mágicas y rápidas sino que, en principio, se conforman con sincerar los números y con un plan para que el ritmo del alza de los precios se reduzca en un par de años.
Atraer los dólares que están fuera del sistema. Un mecanismo que ya esbozó Miguel Bein, una de las espadas económicas de Daniel Scioli, es que captar los dólares de los ahorristas que están fuera del sistema es un mecanismo posible si hay un cambio de expectativas. En una primera etapa, con plazos fijos que ofrezcan tasas atractivas en dólares se puede llamar la atención del ahorrista conservador. El blanqueo hoy vigente figura como una alternativa a evaluar, aunque con otras formas, para que se sume más dinero a las alicaídas reservas.
Jugar en equipo y no con una figura monopólica. Paradójicamente la jornada inicial con líderes deportivos fue en IDEA una muestra mucho más política que de color. Pasar del talento individual al logro colectivo, sintetiza la intervención de Marcelo Lofreda. «Estamos preparados para situaciones extremas y resolver cuestiones de urgencia», resumió, cual ministro de Economía, quien fue director técnico de los Pumas. Desde su experiencia en el hockey, la «leona» Vanina Oneto jugó con otra figura: «Hay que dejar los egos de lado».
Aranguren se refirió a este tema en uno de los paneles de la mañana del viernes. «Hay que volver a lo que el papa Francisco llama cultura del encuentro, donde el diálogo sea la base del desarrollo a futuro».
Generar condiciones para el empleo. Desde el inicio mismo del Coloquio, la creación de empleo privado fue uno de los ejes. «La creación de puestos de trabajo está estancada desde hace varios años. Si queremos crecer y progresar es clave crear empleo genuino, que contribuye al desarrollo humano y social y dignifica a la persona», graficó Javier Goñi, presidente de Alpargatas y del Coloquio.
El presidente de una empresa de mercado masivo contaba que se hacen malabares para mantener la plantilla de empleados. «No damos más con la cantidad de regulaciones y trabas que generan mucho desperdicio de energías. Cuando eso despeje, las empresas cansadas de permanecer sin crecer, van a salir al mercado. El mundo laboral lo va a notar enseguida», se sinceró.
El panorama actual no es de expansión de planteles. «Si el próximo gobierno hace las cosas que debe hacer, se va a notar la mejora en el segundo semestre de 2016», dijo el presidente de una firma de servicios.
Prepararse para el largo plazo en un país de corto. Los empresarios siempre esquivaron las definiciones sobre coyuntura, pero tal vez en este Coloquio se notó, como nunca, la necesidad de mirar más allá de la vuelta de la esquina. Quizá sea el inicio de un nuevo ciclo; quizá el avance de la tecnología y los desafíos que provoca. Lo cierto es que la mirada larga se impuso. «Estamos viviendo cambios tecnológicos muy acelerados que tienen consecuencias muy fuertes en el mundo del trabajo. Puede haber una relación directa entre crecimiento y empleo», asumió el emprendedor del sector tecnológico Santiago Bilinkis.
Hay trabajos actuales que van a desaparecer en el futuro (telemarketers, traductores) y otros que cambiarán significativamente. ¿Cómo no sucumbir? La clave la dio Jorge Colina, economista de Idesa. «No hay que competir contra la digitalización y la robotización, sino que hay que competir junto con ellas». Las nuevas habilidades suman la inteligencia científica, la creativa y la social, pero hay que colaborar para que el escenario acompañe.
Volver al refugio de la ley. Por más básico que suene, ocho de cada 10 argentinos creen que el país vive al margen de la ley y se autodefinen como transgresores o desobedientes, según un sondeo divulgado por el director regional para América latina y el Caribe del Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral, Daniel Zovatto.
Terminar con la caja mágica. «La inflación, la inestabilidad política, los drásticos cambios de rumbo, los controles para corregir lo incorregible como son el gasto público y la presión tributaria récord, son parte de las desmesuras de la Argentina -asumió Llach-. Tenemos una cajita mágica de impuestos nuevos y no coparticipados y otros distorsivos que financia el centralismo fiscal, político y metropolitano y sostiene el retraso del interior», sintetizó.
Recuperar las economías regionales. El tema del debate que hubo en un ciclo organizado por LA NACION también es parte del plan económico de los empresarios. Ven que el desarrollo de las producciones locales es clave para dinamizar el consumo y mantener el federalismo. El economista Eduardo Levy Yeyati habló del tema en una colorida presentación. «Las economías regionales no se salvan con una devaluación, salvo que sea del 500 por ciento». La solución es integral, y según dicen, debe discutirse en el próximo gobierno.
Arreglar con los holdouts. «Las deudas hay que pagarlas. Si el mundo cree que estás en default, estás en default», advirtió Rattazzi.
Y así pasó IDEA. Si bien nadie quiere imponer planes ni medidas, al menos se debate. Y quien quiera escuchar, que escuche.
El paso de los candidatos por el Coloquio
Daniel Scioli
Frente para la victoria
«Vamos a garantizar un vigoroso mercado interno, vamos a incluir más trabajadores en el mercado formal, vamos a seguir sustituyendo importaciones, a buscar más competitividad, pero no con mega-devaluaciones, sino vía la eficiencia»
Sergio Massa
UNA
«Si miramos 2016, el primer desafío es apostar a que nuestra cadena agroindustrial nos genere fuerza en términos de recuperación de divisas. No podemos seguir con un nivel de presión tributaria que asfixia a las economías regionales»
Margarita Stolbizer
Progresistas
«Hay que salir de la política clientelar. Romper el destino de pobreza de los hijos de los más pobres. Brindar educación de calidad para empleos de calidad. La lucha no es mi prioridad sino que debe ser nuestra prioridad, la de todo el país»
Mauricio Macri
Cambiemos
«Vamos a volver a pensar en el largo plazo de la Argentina desde el 10 de diciembre. Vamos a volver a la inflación de un dígito y a tener un Indec creíble; tendremos planes de primer empleo y simplificaremos los trámites a los emprendedores»
Fuente: La Nación – http://www.lanacion.com.ar/1837329-el-plan-urgente-cuales-son-las-medidas-economicas-que-piden-los-empresarios
Sé el primero en comentar en «El plan urgente: cuáles son las medidas económicas que piden los empresarios»