La medida se instrumentará en forma independiente de quien gane las elecciones, porque los equipos económicos de los tres candidatos fuertes incluyen una moratoria de fondos en el exterior. Lo harán con la intención de recuperar los dólares que dilapidó Cristina en el segundo mandato.

Los presidenciables con más chances incluyen esa medida para atraer capitales, dentro de un plan económico que prevé cambios sustanciales a lo que viene haciendo Cristina.

Los tres candidatos –incluso Scioli– admiten en la intimidad modificaciones importantes, que permitan desarticular el modelo que heredarán de la Presidenta
El objetivo del blanqueo que estudia Daniel Scioli, prevé Mauricio Macri y evalúa Sergio Massa sería el de facilitar el ingreso de dólares de los argentinos en el exterior, en principio alrededor de US$ 5.000 millones.

Aunque se proyecta anunciar la decisión como una medida para alentar las inversiones, el blanqueo apunta básicamente a desactivar el rasgo más conflictivo de la bomba económica que deja armada Axel Kicillof: la caída de reservas.

Los equipos económicos del trío trabajan sobre la medida, pero varían sobre la intensidad de los beneficios.

Hay proyectos que establecen bajos costos del blanqueo, otros que no obligan –por un tiempo– a ingresar lo declarado a la Argentina y los más convencionales incluyen el pago de tasas tributarias.

Scioli maneja un esquema de “repatriación de capitales” para adecuarlo a su propuesta de desarrollo. Otras ideas permitirían exteriorizar el dinero, pero sin la obligación de traerlo inmediatamente al país.

La iniciativa de Macri implicaría el ingreso rápido de la plata y también un eventual recupero de recursos para los que no cumplieron con la AFIP.

Igual la medida es polémica y establece una clara distorsión. Primero, premia a los que evadieron y perjudica a los que pagaron sus impuestos.

Mal instrumentada, también puede a abrir las puertas a algo peor: a que se canalice dinero del narcotráfico, como pudo haber pasado estos años con los Cedin. Cristina habilitó una moratoria ideal para lavar fondos de la corrupción doméstica: hace dos años está vigente un blanqueo, cuando lo habitual es que tenga un plazo máximo semestral.

Pero los equipos de los candidatos sostienen lo siguiente: es una medida extrema, que se utilizará para fortalecer las reservas y aliviar el desajuste fiscal que dejará la Presidenta. En los distintos reductos económicos afirman que se puede obtener un mínimo de 5.000 y un máximo de 10.000 millones de dólares para reforzar el stock del Banco Central.

Axel Kicillof sufre ahora la falta de divisas. Para diferir el problema recurrió a una vieja receta argentina: armó un verdadero “festival de bonos” y endeudó al país este año por 16.000 millones de dólares. Y no dudó en tomar una gravosa decisión: pagar tasas de interés altísimas, que duplican a las admitidas por Bolivia, Perú o Uruguay.

La cuestión se tratará en el inminente Coloquio de Idea: será una cumbre empresaria a solo una semana de la elección del nuevo presidente. El encuentro lo conduce Javier Goñi, titular de Alpargatas y miembro del comité de la UIA.

Adrián Kaufmann Brea, jefe de la UIA, lideró el martes una reunión en donde la cúpula fabril coincidió en manifestar su preocupación por el “campo minado” que recibirá el próximo gobierno. Hubo hombres de peso y se reincorporó a la entidad el influyente Diego Videla.

Cristiano Rattazzi fue directo al grano: “La herencia obligará a devaluar y el dólar puede llegar en enero a 14 pesos.”

Los hombres de negocios también coincidieron en otra cuestión: Scioli va a negociar una solución con los fondos buitre. Entre los empresarios existe la información de que Mario Blejer ya se reunió a solas con Jay Newman, el director ejecutivo de MNL Elliot.

Clarín lo anticipó. Voceros del sciolismo lo desmintieron, pero la reunión fue cercana al encuentro de Newman con Carlos Melconián. También habría existido un contacto indirecto del gobernador Juan Manuel Urtubey con el equipo de Paul Singer. La mensajera habría sido Susan Sigal, mandamás del Council of Americas en Manhattan.

En esos encuentros, Jay Newman trasmitió dureza y dijo que Kicillof deja la economía en tan mala situación que obligará al futuro gobierno a acordar rápido con los buitres.
Scioli –que lo niega– y los otros candidatos saben que sin resolver ese conflicto será difícil acceder al crédito para la inversión.

En Wall Street hay expectativa por los cambios, pero a la vez interrogantes: entre dos bancos de inversión circuló un informe lapidario sobre la marcha de YPF, la principal empresa argentina.

El “paper”, de cuatro carillas, dice que existen errores estratégicos de conducción que comprometen el manejo futuro de la compañía petrolera.

Habla de un sobre-endeudamiento incompatible con la baja de precios y de compromisos de pago de intereses similares a los resultados de la YPF: sin fondos genuinos para invertir.

Por eso el valor de la empresa no para de bajar. Los traspiés profundizaron la pelea entre Miguel Galuccio y Dorotea Capurro. La vicepresidenta ya renunció.

Pero se cuenta otra novedad: el sueño de Galuccio de continuar en YPF tambalea, y si la idea no avanza dejará Buenos Aires. Quiere volver a Londres para alejarse de eventuales denuncias futuras sobre manejos que lo comprometen.

Fuente: http://www.clarin.com/opinion/Daniel_Scioli-Moratoria-Fondos_Buitres-YPF_0_1445855468.html