Con datos al 27 de febrero, el pronóstico de cosecha de uvas para 2015 asciende a 26.542.000 quintales, informó ayer el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV). Esta cifra marca un crecimiento del 1% en relación a lo cosechado en 2014 (26,31 millones de quintales) y una producción en línea con el pronóstico histórico anual de la Argentina, que asciende a 26,37 millones de quintales.
El segundo pronóstico de cosecha marca también una baja en relación al primer dato dado a conocer a inicios de febrero, con información a enero. En el primer pronóstico se esperaba una cosecha 2,05% por encima de 2014. La estimación de crecimiento bajó al 1% debido a pérdidas de producción registradas en San Juan y La Rioja por déficit hídrico (falta de agua para regar) y en Córdoba, como consecuencia de las lluvias.
Para Mendoza, el INV espera una cosecha de 18,90 millones de quintales, lo que marca un aumento del 1,04% en relación a la cosecha 2014.
Las bajas en relación al primer pronóstico de cosecha, donde se espera una producción de uvas menor a la cosecha 2014, se registran en San Juan (-0,92%) y en el resto del país (-0,93%), donde se destacan las pérdidas sufridas en La Rioja y Córdoba. En San Juan y La Rioja las pérdidas se deben a falta de agua para riego, mientras que en Córdoba las bajas fueron por las lluvias torrenciales que afectaron a esta provincia.
En el caso de Mendoza, si bien se han registrado lluvias importantes, en febrero de 2015 cayeron 233,54 milímetros (mm) de agua, casi la mitad de los 428,8 mm registrados en febrero de 2014. Por lo que no se esperan problemas en la producción por las lluvias.