El avance de la pavimentación del paso que une el sur de Mendoza con el séptima región de Chile fomentó este verano el aumento del turismo trasandino hacia Argentina, en principio en busca de las bellezas naturales y la gastronomía que ofrece Malargüe, departamento lindero con el vecino país.
A este paso de frontera le faltan pavimentar sólo unos 30 kilómetros del lado argentino (actualmente de ripio en muy buenas condiciones) y desde el límite internacional continúa en Chile por la ruta 115, en excelente condición, hasta la ciudad de Talca, a pocos kilómetros del océano Pacífico.
«La temporada de verano 2015 es muy buena, con una ocupación hotelera promedio general de enero de un 80%, donde se ve muy reflejado la cantidad de autos chilenos en las calles», comentó a Télam Santiago Cara, presidente de la Específica de Turismo de la Cámara de Comercio e Industria de Malargüe.
Cara informó que la presencia de chilenos de la Región del Maule este año «es muy importante» y la mayoría se queda entre dos a cuatro noches en Malargüe, para luego seguir hacia el norte, conocer más de la provincia de Mendoza y luego regresar por el mismo paso internacional sureño.
«La temporada de verano 2015 es muy buena, con una ocupación hotelera promedio general de enero de un 80%, donde se ve muy reflejado la cantidad de autos chilenos en las calles»
Santiago Cara, presidente de la Específica de Turismo de la Cámara de Comercio e Industria de Malargüe
Con una altura de 2.553 metros sobre el nivel del mar, la aduana está habilitada a diario de 8 a 19 y las localidades más próximas en Mendoza son Las Loicas, Bardas Blancas y Malargüe, anfitrionas de los turistas chilenos, deseosos de pasarla bien, comer ricos chivos y conocer los valles, montañas y ríos argentinos.
«Ellos se admiran de todos nuestros desiertos, las grandes distancias y la poca cantidad de gente que habita en paisajes desolados tan inmensos, con cerros a la vista y una visibilidad tan grande, algo que ellos no tienen por poseer mucha forestación», explicó el empresario.
En Malargüe, este año la mayoría de los turistas son de Buenos Aires y Capital Federal, seguidos por Santa Fe -en especial, rosarinos- y, en tercer lugar, los propios mendocinos, todos muy interesados en las excursiones a la Caverna de las Brujas, al parque volcánico La Payunia y al valle de Las Leñas.
Desde la dirección de Turismo definieron a la temporada turística malargüina como exitosa, y señalaron que los visitantes optan por recorrer los volcanes, valles y ríos, y practicar las innumerables actividades propuestas por los prestadores de servicios.
Entre éstas figuran las cabalgatas, trekking, rafting, mountain bike, aventura, naturaleza y gastronomía, que hacen un combo perfecto para las vacaciones.
Para el sector empresario, la presencia de chilenos en Mendoza por el paso sureño es más del doble a la del año pasado, y se vaticina que cuando esté culminado y más difundido será mucho mejor.
Desde el Escuadrón 29 de Gendarmería Nacional, su segundo jefe, Marco Antonio Duette, coincidió en que «este verano se ve un incremento de turistas porque el paso se va haciendo más conocido y se espera un incremento cada vez mayor».
Al igual que enero, que celebró una nueva edición de la Fiesta Nacional del Chivo, febrero se perfila exitoso, y este fin de semana se desarrolla el 55º Encuentro Binacional Argentino-Chileno.
Desde ayer, miles de turistas se dan cita para disfrutar de lo más tradicional de cada país en el cerro Campanario, justo en el límite internacional por el Pehuenche.
Las actividades comenzaron ayer a las 10 con un acto litúrgico en la explanada a los pies del cerro Campanario y la ceremonia oficial con la participación de autoridades de ambos países, y luego siquieron con espectáculos de doma y juegos criollos.
Por la noche, los asistentes disfrutaron de un espectáculo artístico con grupos folclóricos y tropicales, para emprender hoy el regreso.
Autoridades provinciales de ambos países pidieron a quienes viajen al encuentro, su colaboración muy especial con los organismos sanitarios, y anticiparon que no se permitirá vender alcohol ni la transacción por productos animales o vegetales que tienen prohibición de ingreso.
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