Mendoza. Se termina la primera parte del año escolar (jueves y viernes solo asisten los alumnos que rinden materias) y desde el Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE) hacen hincapié en la infraestructura escolar. «Hay más de 200 escuelas en toda la provincia que necesitan ser reparadas, algunas con mucha urgencia», sentenció Adrián Mateluna, secretario general del SUTE, al trazar un balance de la primera mitad del ciclo escolar.
En tanto, docentes de diversos niveles expresaron su preocupación porque «la inflación nos llevó el aumento de las paritarias. Terminaron las partiarias pero queda mucho por luchar y presionar para hacer efectivo el reclamo de los trabajadores», manifestó el dirigente gremial.
Desde la subdirección de Mantenimiento y Reparaciones del ministerio de Infraestructura, Walter Lucero, reconoció el diálogo con el sindicato y destacó que «todas las semanas les hacen llegar una o dos escuelas para arreglar».
El funcionario manifestó que existe una problemática variada, que hay más de 1.300 edificios y que «estamos en el tema día a día». Observó que ante algunas urgencias piden «permiso a la Fiscalía de Estado para contrataciones directas, que no siempre tienen su aprobación».
Recordó, además, que cuando las reparaciones son de consideración, «siempre hay un proceso licitatorio que dura entre 4 y 12 meses, y hay que tener paciencia porque es un trámite que manda la ley».
Por otro lado, Mateluna informó que hay reclamos paritarios que no ha cumplido el Gobierno, tales como la equiparación de las asignaciones familiares. También enumeró otros pedidos, como una nueva Ley de Educación provincial, aumentos para celadores, concursos de jerarquías, mesas con salud laboral y cambios estructurales en la OSEP.
Destacó que «existe en el Gobierno la voluntad por cumplir con lo firmado con el gremio pero nosotros vemos que la falta de soluciones está relacionada con los recursos económicos que no aparecen».
Reclamos docentes
Mientras tanto, docentes de diversos niveles hicieron llegar su descontento al finalizar la primera parte del ciclo escolar 2014. Roberto Garcés, profesor de Inglés de ecundaria, destacó que: «Terminó muy mal esta primera mitad del año. El Gobierno nos maltrata con los salarios y con una pésima infraestructura escolar, ya que muchas escuelas se están viniendo abajo».
El docente de medio recordó que: «Vivimos un ajuste permanente, no solo con salarios pobres sino, por ejemplo, cuando no hay remplazos para celadores que cambian de escuela, por lo que los mismos docentes están limpiando las aulas».
Respecto de los numerosos feriados dijo que «en realidad no me molestan los feriados, al contrario, me alegran y me permiten descansar. Es más grave perder tiempo con las jornadas o con los partidos del Mundial de Fútbol».
Por su parte, Rubén Ferreira, profesor de Nivel Superior, que dicta clases en la Escuela Normal General San Martín, ubicada en el departamento que lleva el mismo nombre, dijo que también se siente maltratado por el Gobierno. «Tenemos sueldos bajos y muchos compañeros tienen que dejar parte de estos por el impuesto a las Ganancias», recalcó. El profesor también expresó que el gremio docente no los defendió como corresponde y no estuvo a la altura de los problemas de la Educación.
Desde la escuela primaria, el maestro Ricardo López, se refirió a la primera parte del ciclo escolar que finaliza. «No puede ser que un chofer de micros gane más que un docente sin desmerecer ese trabajo», se quejó.
En tanto, la docente Patricia Lehman, del sector educativo para Jóvenes y Adultos, destacó que en lo que va del año «no se han dado las titularizaciones que venimos reclamando desde hace tiempo». Explicó que están viviendo una crisis fuerte, porque hay reformas curriculares que no se sabe si provocarán el cierre de numerosas aulas y, en consecuencia, el desempleo docente.
Fuente: El Sol
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