El denominado Pro.cre.auto es una línea de préstamos personales financiada por el Banco Nación, a 60 meses de plazo y por hasta el 90% del valor del vehículo ó 120 mil pesos, a una tasa anual de 17 a 19%. Será para la compra de 26 modelos de autos, cuyos fabricantes acordaron con el Gobierno rebajas del 3 al 13% respecto de los aumentos que se habían aplicado tras la devaluación del verano. El plan entrará en vigencia hoy y se extenderá hasta el 24 de septiembre, informó el Gobierno.

La puesta en escena de ayer tuvo la particularidad de que la Presidenta, en un gesto sin precedentes en mucho tiempo, cediera el atril a su ministra de Industria, Débora Giorgi, para dar los detalles del plan y también para la filípica de estilo cristinista que le dedicó a los empresarios automotrices, al exponer la versión oficial de la fuerte caída del sector. “Se pegaron un tiro en el pie, fueron en contra de la lógica de cualquier empresario”, criticó Giorgi por haber subido los precios “sin ninguna pauta de razonabilidad”, y los acusó también de “demonizar impuestos internos (a los autos de lujo) con distintas actitudes”. Y añadió: “El tiro en el pie empezó a doler y empezaron a aparecer las promociones y las bajas de precios -siguió la ministra- Y entonces, el Gobierno salió a la cancha, para ordenar, con una pauta de un Estado presente”, aseguró. En la platea escuchaban representantes de fábricas de autopartes; de las automotrices Fiat, Ford, General Motors y Toyota; el titular de la CGT Balcarce, el metalúrgico Antonio Caló, y el de Smata, Ricardo Pignanelli, cuyo gremio ha venido sufriendo suspensiones y despidos en los últimos meses por el parate de la actividad.

Giorgi precisó que los clientes del Banco Nación tendrán una tasa de 17% y los no clientes, del 19%. Estimó que el valor de la cuota -que no podrá exceder el 30% del ingreso familiar- será de 3.500 a 3.000 pesos. También incluirá camionetas, que “¡no son las de doble cabina, son las camionetas de laburo!”, gesticuló.

A su turno la Presidenta, ya eximida de dar los detalles, apoyó las explicaciones de su ministra.

“Un tiro en los pies, en mi barrio le dicen de otra manera”, sostuvo.

En esa línea señaló que mientras en el mundo y ante las crisis “aparecen ofertas, baja de precios, acá hicieron todo al revés”. Agregó que “quisieron cargarle al impuesto a los autos importados el sanbenito”. Sostuvo que las automotrices habían tenido “diez años de sostenida ganancia y rendimiento producto de políticas públicas” del Gobierno y cuestionó que “no puede ser que al primer cimbronazo dejen todo en banda”.

Con el anuncio el Gobierno buscó r etomar la iniciativa en materia económica y volver a enfocarse en los problemas domésticos tras haber pasado los peores días que siguieron al fallo adverso en la disputa con los fondos buitre, en medio de un clima dramático que incluyó amenazas de un nuevo default. Este acto se tuvo que postergar la semana pasada a causa de la emergencia en que entró el Gobierno. La Presidenta no mencionó el tema en forma explícita, pero en una jornada con novedades desde el juzgado de Thomas Griesa (ver página 8) pareció aludirlo cuando aseguró que “ estamos en la cancha y vamos a seguir saliendo, aunque algún árbitro nos quiera bombear”.

Las automotrices y concesionarias vienen en baja hace meses. En mayo la caída fue de 40,9% en las ventas internas y de 36% en la producción. Este mes, Argentina y Brasil firmaron la prórroga del acuerdo automotor, pero no se espera una recuperación inmediata. El Gobierno minimizó que exista una “crisis”. Giorgi señaló que con las medidas adoptadas se espera recuperar la caída de producción de 100 mil autos pero dijo que en los primeros 5 meses del año la producción es similar a 2012, y los patentamientos, a las cifras del mismo período de 2011.

Por GUIDO BRASLAVSKY- http://www.ieco.clarin.com/economia/Lanzan-creditos-comprar-caida-ventas_0_1162683723.html