“Juro desempeñar fielmente mis funciones, guardar la Constitución y respetar los derechos de los ciudadanos”. Fue entonces cuando el presidente del Congreso, Jesús Posada, expresó: “Queda proclamado Rey de España don Felipe de Borbón. ¡Viva el Rey! ¡Viva España!”.  
A continuación Felipe VI leyó su mensaje ante las Cortes. Muy emocionado, al monarca se le quebró varias veces la voz, sobre todo, cuando exaltó y agradeció la colaboración de su madre la Reina Sofía quién recibió grandes aplausos todas las veces que su nombre fue mencionado.

Prometió “una monarquía renovada para un tiempo nuevo”. Y sostuvo que “la Corona debe buscar la cercanía con los ciudadanos, saber ganarse continuamente su aprecio, su respeto y su confianza y para ello, velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente”.

Los escaños de diputados y senadores estaban colmados. “Parece que vinimos todos a una boda”, bromeó un legislador de la oposición al ver a sus colegas rigurosamente endomingados. Ellos con trajes oscuros y corbatas claras sin estridencias. Ellas con vestidos oscuros cortos.

Estaban presentes las máximas autoridades del gobierno y del Estado así como los presidentes de las comunidades autónomas incluidas –Cataluña y Euskadi– que no han aplaudido en ningún momento.

Poco antes de que jurara en las Cortes, Juan Carlos de Borbón impuso la faja roja de comandante general de las Fuerzas armadas a su hijo Felipe VI, entregándole el símbolo de jefe supremo de los Ejercitos de Tierra y Aire y de la Armada. El cargo es inherente a la condición de monarca como establece la Constitución.

El acto fue celebrado en la sala de Audiencias del palacio de la Zarzuela. Por primera vez se ha visto a dos personalidades españoles lucir simultáneamente el fajin rojo ya que don Juan Carlos lo usa como capitán general en la reserva.

Con este nuevo atuendo Felipe VI completa el uniforme de Gran Etiqueta del Ejérito de Tierra que exhibirá durante toda la jornada. consta de una guerrera azul con tirilla y puños blancos, pantalón azul, zapatos y calcetines negros, guantes blancos, gorra de plato azul y condecoraciones, además de la faja de capitán general.

Felipe VI estaba muy emocionado e intercambio varios gestos de cariño con su padre y su madre. Después de recibir el saludo de las más altas autoridades militares y civiles se acercó adonde se encontraban los miembros de su familia. Beso a la Reina Leticia a sus dos hijas, la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía, a su madre, a su hermana la Infanta Elena y a su hijo mayor que la acompañaba.

Después partió hacia el edificio del Congreso en un automóvil cerrado custodiado por motociclistas de la Guardia Real en dirección al Congreso de los Diputados.

En las inmediaciones del Congreso de los Diputados y en parte del recorrido real en su llegada a la ciudad, se escucharon silbidos de quienes piden un referéndum entre monarquía y república. Hasta ahora la policía no ha intervenido pese a que han anunciado que actuarán contra los republicanos.

La consigna repetida por quienes protestan es: “Los Borbones a las elecciones”, especialmente cuando la caravana recorría la Gran Vía. Algunos jóvenes gritan: “Felipe quien te ha elegido”, Pero la gran mayoría de las expresiones son favorables a los flamantes Reyes,

La caravana real acompañada de varios helicópteros de custodia llegó a las puertas del Congreso y fue recibida por el presidente del gobierno, Mariano Rajoy, de riguroso chaqué. Todos los ojos estaban centrados en la reina que luce vestido claro de color blanco roto creación de su diseñador favorito, Felipe Vareña. A la Reina la esperaba no solo su familia sino su abuelo de 96 años, combatiente republicano.

Las tropas estaban alineadas sobre la Carrera de San Jerónimo rindiendo honores y se interpretó el himno nacional. El rey revisó las tropas y la banda de música interpretó “El Viejo Almirante” que fue compuesta en honor del abuelo del Rey, el conde de Barcelona. La multitud coreaba “Felipe Felipe”.

Despiertaron mucha atención la Princesa de Asturias, Leonor, y su hermana la Infanta Sofía de 9 y 7 años que saludaron a las autoridades con gran soltura y parecen muy divertidas.

Rajoy acompañó a los Reyes y, con escolta de los alarbaderos reales, juntos atraviesaron la puerta de los Leones reservada para las grandes ocasiones.

A partir de las cero horas Felipe de Borbón y Grecia, 46 años, oficial de las tres Fuerzas Armadas, abogado, Master en Relaciones Internacional, casado con Letizia Ortiz, padre de dos hijas, se convirtió en el primer Rey que llega al poder por un estricto procedimiento constitucional, elegido por las Cortes Generales (diputados y senadores).

En el mismo instante la hija primogénit a, la Infanta Leonor, será Princesa de Asturias, el título tradicional que ostentan los herederos del trono.

Se esperan quizás demasiadas cosas del nuevo monarca que reina pero no gobierna. Pero en una España agobiada por una explosiva crisis económica y política, que ha arrasado con el panorama social que se logró con la transición democrática y deteriorado seriamente el estado de bienestar, el desprestigio de la clase política y una creciente furia popular en contra de los privilegios y la corrupción que agobia al país, hay un clamor por la regeneración.

Fuente: Diario Clarin – Juan Carlos Algañaraz – jcalganaraz@clarin.com http://www.clarin.com/mundo/proclamacion-FelipeVI-Espana-fajin_0_1159684236.html