San Rafael, Mendoza. Imputaron ayer al joven de 21 años que está acusado de asesinar a Daiana Gimena Araya, la chica de 23 años que fue ultimada de un disparo en el cuello cuando estaba el lunes por la madrugada en su casa de Bº El Molino con sus dos pequeños hijos. El muchacho, cuñado de la víctima, fue acusado por homicidio agravado por el uso de arma de fuego y los investigadores investigan cuál fue el motivo que lo llevó a cometer el crimen. Si bien el abanico de posibilidades es amplio, detallaron que “es algo muy personal y que sólo él lo sabe”, dijeron las fuentes, sin entrar en detalles que aún analizan.

Jonathan Marín (21) fue detenido el martes por la mañana en una vivienda del barrio El Molino. Una serie de testimonios lo señalaron como quien estuvo por última vez con la joven madre de 23 años en la casa del callejón Los Troncos de ese barrio. Pero fueron las palabras de la hija de cinco años de la mujer quien lo ubicó en la escena. “Fue el tío Jony”, dijo la pequeña a los policías, con referencia al autor del crimen de su madre.

Con estas pruebas y otros elementos que fueron agregados al expediente, Paula Valeria Arana, la conjueza del Primer Juzgado de Instrucción, lo acusó por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, indicaron.

Los investigadores también analizan el papel que tuvo en una balacera que se produjo en esa misma barriada horas después del asesinato y donde resultaron baleados dos hombres que fueron identificados como Jhon Vergara (19) y Juan Reynoso (48). Por esa balacera, también fueron detenidos Lucas Alaniz (26) y Rita Alaniz (48), hermano y progenitora de Marín, respectivamente.

Tras la acusación, el imputado fue trasladado nuevamente hasta la Comisaría Octava y luego iba a ser enviado al penal.

CRUEL FINAL. Daiana Gimena Araya fue encontrada sin vida por una vecina. La joven madre estaba sentada en una silla, junto a la mesa. Sus hijos –una nena de 5 años y un nene de 2– estaban en la vivienda. La mujer que descubrió el cadáver llamó al 911 y los efectivos llegaron a la escena.

Horas después, confirmaron que Araya había sido asesinada de un disparo que ingresó por el cuello, sin presentar orificio de salida. Con la información aportada por testigos, detuvieron a su cuñado, hermano de su pareja, quien se encuentra en el penal por comercialización de estupefacientes. La mujer fue detenida el año pasado por querer ingresar droga a la cárcel para su concubino.

Los investigadores creen que el móvil del crimen puede venir por un problema que haya surgido por un asunto relacionado con las drogas, explicaron.

Fuente: El Sol