San Rafael, Mendoza. Ayer, el Concejal Lucas Quesada se hizo presente en el paraje Valle Grande, a la altura del kilómetro 22, ya que vecinos de la zona denunciaron el desmonte y la quema de flora autóctona.
De hecho, constató que se habían cortado algunos arbustos y se había iniciado la quema de estos a la vera de la montaña.
Dichas acciones revisten una importante gravedad, ya que por un lado se está quemando flora autóctona, la que tiene la característica de ser altamente inflamable en exposición al fuego, como lo son por ejemplo la jarilla o el algarrobo. Evidentemente se está exponiendo a la zona a una situación que puede llegar a ser catastrófica debido a la boscosidad que se ha alcanzado con estas especies a la vera de la montaña. Afortunadamente efectivos policiales, que fueron llamados por los vecinos, pudieron detener las llamas a tiempo, antes de que tomaran otras proporciones.
Por otro lado, la flora del lugar sirve para afirmar el suelo y de ese modo evitar derrumbes. Cabe destacar que las zonas donde se han efectuado tanto la quema como los desmontes es zona 7, de alta peligrosidad en cuanto al derrumbe de los cerros.
Sin duda los autores de esto no pudieron ignorar las características de la zona, ya que frente al lugar hay carteles que indican el peligro de derrumbe.
El año pasado, desde el bloque de la UCR se hizo un pedido de informe respecto al desmonte en el mismo lugar. El mismo nunca fue respondido.
Sin duda hay un Estado ausente, la realidad del Valle Grande es prácticamente anárquica, donde personas con intereses en el lugar desmontan y queman vegetación para apropiarse de terrenos, entre otros muchos hechos que se realizan y que son de considerable gravedad, sin que haya un adecuado control ni sanciones.
Quesada se ha comprometió a trabajar al respecto, pero sería muy importante que demás autoridades municipales y provinciales tomen cartas en el asunto para controlar y poner un poco de orden en la zona de Valle Grande.