ROSARIO.- La Fundación LED y la organización Friedrich Naumann Argentina realizaron en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) una jornada de análisis sobre el informe anual 2013, que advierte sobre «limitaciones al ejercicio de la libertad de expresión».
La presidenta de Libertad de Expresión + Democracia (LED), Silvana Giudici, denunció que, a la luz del relevamiento en todo el país, se observa que «la libertad de expresión está tocando los niveles más bajos que se registran en democracia».
La ex diputada radical evaluó que durante el año pasado se contabilizaron 455 hechos que constituyen restricciones a la libertad de expresión.
«Desde que nosotros realizamos los informes vemos que la situación del país se viene agravando, con una cantidad alarmante de intimidaciones, amenazas y atentados contra periodistas, algo que es mucho más grave en el interior del país que en Buenos Aires», señaló Giudici, quien compartió un panel sobre «Políticas públicas para garantizar la libertad de expresión» con Jörg Dehnert, representante en la Argentina de la Fundación Naumann.
La ex legisladora de la UCR consideró que con este tipo de actividades en el interior del país se pretende «poner la mirada sobre el clima y los problemas que existen, en general, vinculados con la libertad de prensa y las complicaciones que tienen los periodistas de ejercer su trabajo».
«Desde 2006 venimos alertando sobre el nivel de degradación que está teniendo el ejercicio del periodismo y la libertad de expresión en la Argentina», recordó.
En otro panel, dedicado a reflexionar sobre el periodismo como profesión de riesgo, participaron los periodistas Luis Rosales, Juan Pablo Suárez y Jorge Salum. El primero contó su experiencia, tras ser despedido en febrero de 2013 de un canal de noticias porteño, donde realizaba columnas de análisis internacional. Dio cuenta de la estructura de medios que se creó en torno al manejo de la pauta publicitaria oficial.
Juan Pablo Suárez, jefe de redacción del sitio web Última Hora de Santiago del Estero, relató la detención que sufrió en diciembre pasado cuando fue a cubrir una protesta policial en la capital santiagueña. Estuvo preso diez días, acusado de sedición y en los últimos días la causa cambió de carátula y su caso pasó a ser catalogado por la Justicia como «incitación a la violencia colectiva».
«Se aplicó la denominada ley antiterrorista, por lo que pueden condenarme a entre 6 y 12 años de cárcel. Prefiero ir preso a vivir de rodillas», confesó, entre lágrimas.
CONDENÓ ADEPA UNA DENUNCIA
La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) condenó la denuncia penal contra el periodista Juan Pablo Suárez presentada ante el fuero federal de Santiago del Estero dentro de la ley antiterrorista y la emparentó con «sistemas políticos totalitarios». Llamó a no ejercer «la coerción legal o la violencia encubierta».
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