El senador Ernesto Sanz quiso ver con sus propios ojos cómo el Gobierno combate al narcotráfico en la frontera de Salta y Jujuy, la zona caliente del ingreso de cocaína y marihuana al país. Allí, según explicó a Clarín, se encontró con una panorama que define como preocupante. «Lo que dijo ayer Capitanich del combate al narcotráfico es todo mentira: los radares no funcionan bien y hay pistas de aterrizaje clandestinas», denunció.

«Ayer verificamos in situ que el Gobierno tiene un déficit de gestión alarmante en términos de combate al narcotráfico, no han cubierto las vacantes judiciales, vinimos hasta acá a hablar con los jueces, con los gendarmes y hemos visto un nivel de precariedad sorprendente», manifestó.

Junto al senador jujeño Gerardo Morales, Sanz recorrió la frontera del NOA y vio con sus propios ojos lo que describe a continuación: «En el escuadrón 20 de Orán, ubicado en la zona más caliente del narcotráfico, el radar solo funciona mediodía y cubro una altura de solo 2000 metros, es decir que si un avión vuela a 2200 metros, lo esquiva».

Ayer, en su extensa exposición en la Cámara de Diputados, el chaqueño negó la existencia de pistas clandestinas de aterrizaje para avión que mueve droga. «No hay ningún dato que lo corrobore», señaló y destacó que el Gobierno llevó de 4 a 22 los radares de control aéreo.

«Desmiento desde el mismo lugar de los hechos lo que dijo Capitanich y lo desafío a que la próxima visita la tengamos en la frontera, que vengan todos los legisladores acá y debatamos la lucha contra el narcotráfico», lo replicó.

Fuente: Clarin