A más de 4.300 metros sobre el nivel del mar, en pleno Parque Provincial Aconcagua, la ministra de Seguridad y Justicia, Mercedes Rus, alcanzó el destacamento policial más alto del mundo ubicado en Plaza de Mulas y se convirtió en la primera ministra en realizar el ascenso. La visita puso en primer plano el trabajo que desarrolla la Patrulla de Rescate y Auxilio de Montaña (UPRAM) de la Policía de Mendoza en uno de los entornos más exigentes del país.

La travesía comenzó a las 2.30 del sábado, con la salida desde la ciudad de Mendoza, ubicada a 750 metros sobre el nivel del mar. La primera parada fue el destacamento policial de Puente del Inca, a 2.800 metros de altura, donde la ministra mantuvo un encuentro con efectivos de la UPRAM junto al subdirector de la Policías, Roberto Favaro.

Cerca de las 6.30, la comitiva ingresó al Parque Provincial Aconcagua por Horcones y fue recibida por el jefe seccional de Guardaparques, Pablo Perello. A las 7 se inició el recorrido en mulas.

El trayecto incluyó una parada en Confluencia, donde se realizan los controles obligatorios para quienes ingresan al parque. Allí, a unos 3.100 metros de altura, se efectuaron los chequeos médicos de rutina para evaluar las condiciones físicas antes de continuar el ascenso.

El recorrido siguió con detenciones intermedias destinadas a hidratación y descanso. Más adelante, se arribó a una construcción de ladrillos destruida conocida como Colombia, un punto que anticipa la proximidad del destino. Desde allí se inició la última subida por la Cuesta Amarilla hasta Plaza de Mulas.

Finalmente, alrededor de las 13.30, Rus llegó al destacamento policial tras unas cinco horas de ascenso. En ese punto se ubican la base del Hotel Refugio con el mismo nombre y la Base Operativa de la UPRAM, a 4.370 metros sobre el nivel del mar.

El regreso se realizó con la misma modalidad y demandó cerca de cuatro horas, con llegada a la zona baja alrededor de las 18.30. Antes de emprender el retorno definitivo, la ministra volvió a pasar por el destacamento, y cerró así una jornada atravesada por la exigencia física y las condiciones propias de la altura.

La travesía estuvo marcada por los cambios bruscos de clima, el frío y el fuerte viento, que en algunos tramos obligaron a detener la marcha. En ese contexto, resultó clave el asesoramiento brindado por la Patrulla de Rescate, especialmente en materia de recomendaciones técnicas, hidratación y alimentación durante el ascenso y el descenso.

La presencia de la ministra en Plaza de Mulas puso en valor el trabajo que realiza la Patrulla de Rescate y Auxilio de Montaña, una unidad especializada que cumple 30 años de presencia ininterrumpida en el Parque Provincial Aconcagua. Cada temporada, el grupo es responsable de la operatividad de los destacamentos de altura, la asistencia a montañistas, las tareas de prevención y los operativos de rescate.

El ascenso de Mercedes Rus constituyó un hecho inédito para la cartera de Seguridad y Justicia y, al mismo tiempo, un reconocimiento institucional al esfuerzo, la preparación y el compromiso de los efectivos que cumplen funciones permanentes en la montaña más alta de América.

La UPRAM y su temporada en el Aconcagua

Con la llegada de noviembre, la Patrulla de Rescate y Auxilio de Montaña (UPRAM) de la Policía de Mendoza retomó su trabajo en el Parque Provincial Aconcagua, desplegando a sus equipos para garantizar asistencia y seguridad a los montañistas que desafiarán la altura durante la temporada. El operativo comenzó con el ascenso de los efectivos hacia sus bases de altura, donde acondicionan las instalaciones y revisan el equipamiento que será clave para responder ante cualquier emergencia.

Entre las tareas de preparación se incluyen la puesta a punto del destacamento de Plaza de Mulas y del puesto avanzado de Nido de Cóndores, ubicado a 5.500 metros. En ambos campamentos, los efectivos acondicionan las instalaciones, equipos y comunicaciones que serán fundamentales para las tareas de rescate y auxilio durante los próximos meses.

Durante la temporada, la unidad opera con dos turnos de guardia de diez rescatistas cada uno, encargados de asistir a montañistas en situaciones críticas, realizar búsquedas y coordinar evacuaciones dentro del parque. Además, se mantiene una guardia permanente en Base Cóndor, en Las Heras, desde donde se gestionan los requerimientos en el resto del cordón montañoso provincial.

La labor de la UPRAM va más allá de la asistencia directa: sus efectivos también desarrollan acciones de prevención y concientización, orientadas a educar a quienes ingresan a la montaña sobre los cuidados necesarios para ascender con seguridad y fomentar un vínculo responsable con el entorno natural.