Mendoza transita el inicio de la temporada de calor y el termómetro empieza a subir. Al igual que otros años, el calor viene acompañado de un aumento importante de mosquitos en el ambiente pero también de bacterias como la Escherichia coli que pueden poner en riesgo la vida de los menores de cinco años. El último Boletín Epidemiológico Nacional confirmó que la situación sanitaria provincial se mantiene estable, con vigilancia activa en ambos frentes.

La presencia de mosquitos en Mendoza se viene incrementando desde hace unas semanas producto del aumento de la temperatura y algunas lluvias que tuvieron lugar en la provincia. Desde el Ministerio de Salud y Deportes descartaron la posibilidad de un brote de dengue para los próximos meses pero insistieron en reforzar las medidas de prevención.

El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti, conocido como el mosquito “hogareño” por sus hábitos domiciliarios. Es de color oscuro con franjas y manchas blancas y se cría en recipientes con agua. La picadura de este mosquito, además de dengue, puede transmitir otras arbovirosis como Zika y chikungunya.

“No esperamos tener un brote importante esta temporada pero hay que esperar para ver cómo vienen las lluvias, el clima y qué resulta del flujo poblacional por el tema de los turistas que podrían estar infectados. La provincia tiene el mosquito y tenemos que seguir trabajando en las medidas de prevención”, explicó la directora de Epidemiología de Mendoza, Andrea Falaschi.

Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona enferma de dengue, y luego pica a otras personas, puede transmitir esta enfermedad. El contagio se produce principalmente por la picadura de los mosquitos infectados, nunca de forma directa de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna.

Hasta el momento, la provincia cuenta con diez casos notificados de dengue. De ese total, seis fueron descartados y uno está catalogado como sospechoso ya que aún no están los resultados. Esto significa que la provincia no registra circulación local del virus y que los casos bajo estudio no tienen antecedentes de viaje a zonas con brote. “Hay tres sospechosos que están esperando una segunda muestra pero clínicamente no pareciera ser dengue”, agregó Falaschi.

A nivel nacional, la temporada 2025-2026 comenzó con focos activos en provincias del norte y el litoral argentino, pero hasta el momento Cuyo se mantiene libre de transmisión comunitaria.

La recomendación de los organismos internacionales respecto a la vacunación, es que se haga en los lugares que tienen muchos casos, una incidencia de más de 4.200 por cien mil habitantes y Mendoza no llega a 300 por 100.000 en el total de la provincia. “No estamos pensando en colocar la vacuna porque la tasa de incidencia en Mendoza es muy baja”, confirmó la funcionaria.

El Síndrome Urémico Hemolítico sigue bajo vigilancia

El Síndrome Urémico Hemolítico es una enfermedad grave y potencialmente mortal, provocada por la bacteria Escherichia coli productora de toxina Shiga, que puede encontrarse en alimentos contaminados, especialmente carne picada mal cocida, lácteos sin pasteurizar y verduras crudas.

La enfermedad mantiene vigilancia activa en Mendoza. En el 2024, se registraron 18 casos confirmados y hasta ahora hay 15 casos pero aún quedan por delante tres meses de calor. Los especialistas advierten que los niños menores de cinco años son los más vulnerables, ya que el síndrome puede derivar en insuficiencia renal aguda y otras complicaciones severas.

“La curva de casos está prácticamente igual, somos una provincia que tiene alta incidencia junto con Buenos Aires pero aún restan los meses de calor donde la enfermedad suele tener mayor prevalencia”, explicó la titular de Epidemiología de Mendoza .

Desde el Ministerio de Salud provincial recordaron que la prevención es la herramienta más eficaz e insistieron en cocinar completamente la carne, evitar el consumo de leche y jugos sin pasteurizar, lavar frutas y verduras antes de consumirlas y lavarse bien las manos después de ir al baño o cambiar pañales.

“El Síndrome Urémico Hemolítico se puede producir por la ingesta de carne y verduras contaminadas o la sumersión en aguas contaminadas. Si uno se mete en un canal, zanjón o laguna donde los animales que tienen esta bacteria en su intestino han defecado, probablemente el agua esté contaminada. Es importante verificar si las aguas que se usan con fines recreativos, son controladas y están cloradas”, finalizó Falaschi.

Síntomas

El dengue tiene manifestaciones que incluyen fiebre (38° o más) acompañada de uno o más de los siguientes síntomas:

  • Dolor de cabeza, detrás de los ojos, muscular y/o de articulaciones
  • Náuseas y/o vómitos
  • Cansancio intenso
  • Aparición de manchas en la piel
  • Picazón
  • Sangrado de nariz y/o encías
  • Ante la presencia de fiebre y cualquiera de estos síntomas: se debe acudir de manera inmediata al centro de salud más cercano para recibir el tratamiento adecuado.

El síndrome urémico hemolítico (SUH) es una enfermedad grave que afecta principalmente a los riñones y suele aparecer después de una infección intestinal causada por la bacteria Escherichia coli (E. coli) productora de toxina Shiga. Es más frecuente en niños pequeños, aunque también puede afectar a adultos.

Etapa inicial (fase gastrointestinal)

Aparece entre 3 y 10 días después de ingerir alimentos o agua contaminada:

  • Diarrea intensa, a veces con sangre
  • Dolor abdominal tipo cólico
  • Náuseas y vómitos
  • Fiebre moderada o sin fiebre

Etapa avanzada (afectación renal y sanguínea)

Después de unos días, los síntomas intestinales pueden mejorar, pero aparecen los signos más graves:

  • Orina escasa o ausente (oliguria o anuria)
  • Palidez marcada (por anemia hemolítica)
  • Cansancio extremo o somnolencia
  • Hinchazón (edema) en cara, piernas o manos
  • Moretones o sangrados fáciles (por la destrucción de plaquetas)
  • Presión arterial alta
  • Confusión, irritabilidad o convulsiones (en casos severos)

 

Fuentehttps://www.elsol.com.ar/mendoza/dengue-y-sindrome-uremico-hemolitico-los-desafios-de-cara-al-verano-en-mendoza/