La geóloga Marita Ahumada participó del Tercer Congreso de Geología Aplicada y remarcó que la minería puede convertirse en motor de inclusión laboral femenina.
El Tercer Congreso Argentino de Geología Aplicada a la Ingeniería y al Ambiente, celebrado en la UTN Regional Córdoba a finales de septiembre, tuvo un momento destacado con la participación de la geóloga mendocina Marita Ahumada, quien junto a la psicóloga María Alejandra Jerez presentó el trabajo “La industria minera, un lugar de oportunidades para la mujer”.
Con un enfoque claro, Jerez y Ahumada sostuvieron que la minería, históricamente asociada a un perfil masculino, atraviesa un proceso de transformación que puede generar nuevas oportunidades laborales para las mujeres en Argentina.
La minería como oportunidad de inclusión
Lejos de concebir a la actividad minera solo como un sector extractivo, Ahumada planteó que se trata de un ámbito con capacidad de inserción social y económica. En Argentina, de acuerdo con relevamientos de Women in Mining (WIM), entre el 2017 y el 2022 el empleo femenino en minería creció un 3,7%, lo que representó el ingreso de más de 1.700 trabajadoras, incluso en medio de la pandemia.
La propuesta de Ahumada y Jerez se enmarca en la Agenda 2030 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que promueve el trabajo decente, la equidad de género y la reducción de desigualdades.
Redes de acompañamiento y mentorías
Un eje central de la presentación fue el rol de WIM Argentina, organización que impulsa programas de mentoreo, capacitaciones y espacios de escucha activa para mujeres que ingresan o se desarrollan en la minería.
Ahumada destacó que estas redes profesionales han sido decisivas para sostener trayectorias en un ambiente donde todavía persisten resistencias culturales. “Las redes sociales y profesionales han sido una herramienta clave para que muchas mujeres encuentren un lugar en la industria”, sostuvo.
De hecho, los programas de mentoring nacional e internacional son cada vez más valorados por jóvenes profesionales que buscan trazar un plan de carrera. Según las autoras, este tipo de acompañamiento es vital para fortalecer la permanencia femenina en el sector y garantizar su progreso hacia posiciones de liderazgo.
Educación y formación: la gran deuda
El informe presentado en el Congreso reveló que uno de los principales obstáculos para ampliar la participación femenina es la falta de oferta educativa específica en minería y carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) en varias provincias.
Un relevamiento realizado por WIM Argentina y Poliarquía Consultores en 2025 mostró que entre el 63% y el 74% de los encuestados percibe que no existe una oferta académica suficiente para cubrir las necesidades del sector minero.
La demanda más fuerte se concentra en operadores de maquinaria pesada, técnicos en geología, seguridad e higiene, y mantenimiento mecánico y eléctrico, pero también se requieren perfiles vinculados a la salud mental, la contención emocional y la psicología motivacional.
“Es fundamental que la educación secundaria, técnica y universitaria se vincule con las necesidades de la minería. De lo contrario, se seguirá reproduciendo la brecha entre lo que la industria demanda y lo que la academia ofrece”, advirtió Ahumada.
Desafíos culturales y sociales
A pesar de los avances, el sector minero sigue siendo altamente masculinizado y enfrenta desafíos culturales persistentes. Uno de los más recurrentes es la relación entre la maternidad y la continuidad laboral.
De acuerdo con encuestas realizadas por WIM, muchas mujeres abandonan sus puestos no por falta de interés o capacidad, sino por la ausencia de redes de cuidado y la presión social que las coloca como principales responsables de la crianza.
En ese sentido, se discuten medidas como licencias parentales equitativas, espacios de lactancia en campamentos mineros y políticas de flexibilidad que permitan compatibilizar la vida laboral con las responsabilidades familiares.
“Muchas mujeres dejan sus puestos no porque quieran, sino porque el entorno no ofrece las condiciones necesarias para sostener sus carreras”, subrayó Ahumada durante su intervención.
El valor de las habilidades blandas
Además de la capacitación técnica, el análisis presentado en Córdoba resaltó la importancia de las llamadas habilidades blandas: resiliencia, flexibilidad emocional, empatía y capacidad de trabajo en equipo.
En contextos de campamentos mineros, donde las jornadas son extensas y el aislamiento geográfico es alto, contar con estas competencias resulta decisivo. Según Jerez y Ahumada, se trata de un terreno donde disciplinas como la Psicología, la Comunicación y el Trabajo Social pueden aportar herramientas clave para la convivencia y la prevención de conflictos.
El futuro del sector
Las proyecciones coinciden en que la minería será uno de los sectores con mayor crecimiento en Argentina durante los próximos cinco a diez años, especialmente a partir de la expansión del litio, el cobre y el oro.
En este escenario, la participación femenina no solo es una cuestión de equidad, sino también de competitividad. “El sector necesita diversidad de talentos para sostener su crecimiento. La mujer puede y debe tener un rol protagónico en este proceso”, enfatizó Ahumada.
El trabajo en red entre Estado, empresas privadas, universidades y organizaciones civiles aparece como condición indispensable para garantizar entornos laborales seguros, libres de violencia y con igualdad de oportunidades.
Una transformación en marcha
El paso de Marita Ahumada por el Congreso de Córdoba reflejó un fenómeno más amplio: la transformación cultural y estructural de la minería en Argentina. De a poco, se multiplican los espacios para mujeres geólogas, ingenieras, técnicas y profesionales de diversas disciplinas que aportan a una industria compleja, con grandes desafíos pero también con enormes posibilidades de desarrollo.
“La minería también es una oportunidad para las mujeres”, resumió Ahumada en su exposición. La frase, sencilla, pero contundente, encierra una invitación a repensar el sector como un espacio que, además de generar riqueza, puede convertirse en motor de equidad, innovación y desarrollo sostenible para el país. / CO
Fuente;https://www.losandes.com.ar/economia/mineria-y-trabajadoras-mujeres-inclusion-y-desafios-un-sector-transformacion-n5964416





