Un equipo de investigación del INTA estudia la generación de antioxidantes naturales a partir un subproducto de la industria piscícola.
- El 60 por ciento del pescado no es consumido en alimentación humana pero contiene proteínas de alto valor.
Investigadores del INTA generan compuestos con capacidad antioxidante a partir de cabezas de tilapia azul.
En la industria piscícola, solo el 40 % del pescado se destina al consumo humano, mientras que el 60 % restante —principalmente cabezas, piel, escamas y vísceras— se considera un subproducto de bajo valor. Sin embargo, estos residuos contienen proteínas de alto valor biológico que pueden transformarse en compuestos antioxidantes mediante procesos enzimáticos.





