Estamos en septiembre, de manera que agosto “fue”.

Ergo, no pregunte por los pronósticos referidos al aumento de los precios al consumidor entre julio y agosto de 2024, sino por las estimaciones.

El miércoles próximo, a las 16 horas, se conocerán los datos del Indec. Antes aparecerán algunas estimaciones privadas, y también la que se realiza en CABA.

Entre junio y julio pasados, en promedio, los precios al consumidor aumentaron 4%, tanto en GBA (CABA + suburbios) como en el promedio nacional.

¿Qué se estima que ocurrió en agosto? Lo mismo, es decir, decimal más, decimal menos, también 4%.

Pero ésta es una sutileza.

La clave es la siguiente: como economista, no perderé el sueño si, finalmente, la tasa de inflación de agosto no cayó frente a la de julio. Le digo más: tampoco lo perderé aunque dé algo por encima del registro del mes anterior.

Porque el resultado de una política económica no hay que medirlo de manera milimétrica, y mucho menos inferir un posible cambio de tendencia si la tasa de inflación de agosto supera a la de julio.

Escribo esto pensando particularmente en el Poder Ejecutivo Nacional. No tanto en el Presidente y su equipo económico, integrado por economistas, sino en el ala política del oficialismo. Quienes, no siendo economistas, de repente piensan que el valor de cada variable en cada período es el techo o el piso de lo que aparecerá después. Porque la realidad puede plantear oscilaciones dentro de un mismo proceso.

Y no estoy pensando simplemente en mensajes y el mundo comunicacional, sino -mucho peor aún- en el plano de las decisiones. Un ejemplo: la disminución, en 10 puntos porcentuales, de la alícuota del impuesto PAIS puede que reduzca algunos precios internos. Pero ciertamente que no de la noche a la mañana, o en las próximas semanas. Porque nadie puede creer que miles de importadores ya compraron artículos en el exterior y los embarcaron en aviones para llenar las góndolas de los supermercados, y disciplinar de inmediato a los productores locales.

Otro ejemplo: la continuidad de la disminución de las distorsiones en tarifas.

¿Se estacionará la tasa de inflación en 4% mensual? ¡Qué fácil es hacer preguntas atractivas!