Son datos de la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME). La menor brecha entre lo que se le pagó al productor y lo que debió abonar el consumidor se dio en los huevos, mientras que en el limón se exhibió la mayor diferencia
La brecha existente entre el precio de los alimentos a la salida de los campos y los exhibidos en las góndolas continúa siendo un problema para algunas economías regionales, sobre todo cuando emprenden procesos de expansión entre ambas puntas. No obstante, durante junio esta diferencia se estabilizó respecto a mayo, según marcó en un informe la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
De acuerdo con el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD), elaborado por el sector de Economías Regionales de la entidad empresaria en base a los datos que se relevan mensualmente en el territorio nacional de 24 agroalimentos que componen la canasta, el consumidor pagó 3,5 veces más de lo que recibió el productor en la tranquera de su campo. Esto quiere decir que, por cada peso que recibió el productor, el consumidor pagó $3,5 en góndola.
Por otro lado, los productos frutihortícolas fueron los que mayor brecha exhibieron entre el precio pagado al productor “en tranquera” respecto a lo que debió abonar el consumidor en mostrador. Así, teniendo en cuenta una canasta de 19 alimentos de esta clase, por cada peso que se le pagó al agricultor, el consumidor pagó $5,1, mientras que en lo que respecta a los productos de origen animal, esa equivalencia fue de $1 para el ganadero y de $3 para el consumidor.
Mayores brechas
El podio de las mayores diferencias registradas entre lo que recibe el productor y lo que paga un comprador durante junio se dio en el limón. Según CAME, la brecha de precios estuvo ubicada en 12,1; es decir, el consumidor pagó $12,1 por cada $1 cobrado por el productor.
Respecto a los precios, en origen se observa un aumento del 6,3%, mientras que en destino la disminución de precios respecto de mayo fue del 10%, mientras que en segundo puesto se ubicó el zapallito, con una brecha de 8,1 veces. Así, en origen se registra un aumento del 2,1%, cuando en el destino se registra una suba del 32 por ciento.
La manzana roja ocupó el tercer puesto, con una multiplicación de su precio de 7,2 veces desde que salió del campo hasta llegar al consumidor. En origen se registró una baja mensual del 12,2%, mientras que en destino se observa una disminución en los precios del 1%, como consecuencia de las heladas tardías y la sequía, inclemencias climáticas que afectaron a la provincia de Río Negro y disminuyeron la calidad de la fruta. Situación similar ocurrió con la pera.
En cuarto lugar se ubicó la naranja, con una brecha de 7,1 veces. Es decir, por cada $7,1 que pagó el consumidor, el productor recibió $1, mientras que el quinto puesto fue para la zanahoria, cuyo precio se multiplicó 6,8 veces desde el campo a la góndola.
Menores brechas
La menor brecha exhibida fue para los huevos, ya que el pagado al productor se multiplicó dos veces hasta llegar a la góndola. Respecto a las variaciones mensuales de los precios, en origen se observa una baja del 0,5%, mientras que en destino descendió 4%. Esta misma diferencia se dio en pimiento, aunque la variación de precios fue distinta, ya que en origen tuvo un aumento del 37,4%, mientras que en destino se observa una baja del 24 por ciento.
Por su lado, la brecha de la papa se ubicó en 2,5 veces. Respecto a los precios, se registró un aumento en origen del 12,5%, mientras que en destino se registra una suba del 14%. “El aumento en origen se da, principalmente, por un reacomodamiento de precios, ya que habían bajado el mes anterior debido a grandes precipitaciones en el sudeste de la provincia de Buenos Aires que limitaron la cosecha”, indicaron desde CAME.
El pollo también, la brecha entre origen y destino se ubicó en 2,9 veces; es decir que por cada $1 cobrado por el productor el consumidor pagó, en promedio, $2,9 en destino. Respecto a las variaciones mensuales de precios se observa que en origen disminuyó 32%, mientras que en destino hubo una disminución del 5%. Según los productores, la baja en el precio de origen se da como consecuencia de la suspensión de las exportaciones de pollo, debido a los casos de gripe aviar detectados en marzo. “Ante la imposibilidad de los frigoríficos de exportar, no tuvieron más opción que volcar toda la comercialización al mercado interno, produciendo un exceso de oferta y, en consecuencia, disminuyendo el precio”, destacaron desde la entidad empresaria.
Fuente;https://www.infobae.com/economia/campo/2023/07/18/el-precio-de-los-alimentos-en-junio-los-consumidores-pagaron-35-en-gondola-por-cada-1-que-recibio-el-productor/
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