La iniciativa busca evitar la contaminación visual y ambiental que genera este tipo de publicidad. En ese contexto, los carteles políticos que suelen ser atados a dichas estructuras, también estarán incluidos en la prohibición.

El proyecto establece que, en caso de incumplimientos, serán pasibles de fuertes sanciones económicas las personas que cuelguen los carteles, quienes estén publicitados en los mismos y las empresas u organismos al que pertenezcan dichas promociones. Aquí pueden ser incluidos los partidos políticos.

Una vez promulgada dicha normativa, el Municipio tendrá la facultad de intimar el retiro inmediato de la cartelería por parte del infractor o hacerlo por sus propios medios.

Se aguarda que el tratamiento para modificar la ordenanza 11.923 (normativa vigente) ocurra en la próxima sesión del Concejo Deliberante.