El escenario que experimentará la región podría llegar a ser similar a la situación que se dio en el Hemisferio Norte en los últimos meses, con sequía severas y temperaturas elevadas, en particular sobre Europa y el este de Asia.
No obstante, Juan Rivera, doctor en Ciencias de la Atmósfera y los Océanos, del Programa Regional de Meteorología del Conicet, consideró que, “al ser el Hemisferio Sur más oceánico, esa mayor cantidad de agua amortigua el efecto del calentamiento, con lo cual, si bien es esperable que ocurran anomalías térmicas importantes en el verano, no tendrían la magnitud de lo registrado en Europa”.
Pocas lluvias
El nuevo informe climático trimestral (septiembre- octubre- noviembre) difundido a fines de agosto por el Servicio Meteorológico adelantaba que en Mendoza, las lluvias podían ser normales e inferiores a lo esperable para estos meses del año.
En tanto, los pronósticos estacionales para el trimestre de verano (diciembre-enero-febrero) muestran una señal climática consistente con una mayor probabilidad de registrar acumulados de precipitación normal o levemente por debajo de lo normal.
“En línea con estas proyecciones, es posible que se registren períodos de lluvias muy intensas, asociados a la ocurrencia de tormentas convectivas típicas de la época, con períodos prolongados de varios días sin precipitaciones. Esto indicaría una extensión de las condiciones relativamente secas pronosticadas para esta primavera en la región de Cuyo”, indicó Rivera.
Típicamente, en el trimestre de verano se acumulan más de 110 mm, lo que representa poco más del 40% de la precipitación anual total en el Gran Mendoza.
De cumplirse este panorama, la provincia estaría lejos de revertir las condiciones deficitarias registradas durante el invierno en la Cordillera de los Andes, donde los acumulados de nieve estuvieron por debajo de lo normal.
De hecho, ante la falta de agua, el Departamento General de Irrigación extendió hasta el 15 de septiembre la corta anual del río Mendoza, que inicialmente estaba prevista para el 14 de agosto.
“Está terminando el peor año hidrológico del río Mendoza en los últimos 50 años”, había expresa Irrigación a través de un duro comunicado donde argumentó la medida adoptada por la subdelegación del río Mendoza.
Y advertido: “Septiembre, octubre y noviembre serán meses complicados porque habrá pocos deshielos y vamos a estar erogando para el agua de primavera y heladas”.
La provincia, un horno
Según muestran los datos, el panorama no será agradable para los adeptos al “team invierno”.
Las predicciones destacan una mayor probabilidad de que la región anote temperaturas por encima de lo normal, lo cual podría dar como resultado la ocurrencia de olas de calor en la provincia.
Este tipo de eventos, de acuerdo con los especialistas, ya se observaron en el verano pasado, cuando los termómetros marcaron máximas que superaron los 40 °C a mediados de enero.
«Este pronóstico contrasta con el invierno relativamente frío que se registró este año, lo cual manifiesta un incremento en la variabilidad climática regional. Entre los factores responsables, podemos destacar el fenómeno de La Niña, que se extiende a lo largo de los últimos tres años y propicia la falta de precipitaciones, en particular en la zona central de Argentina”, concluyó el científico.
Por:Adriana Luiadriana.lui@elsol.com.arAdrianaLuiPh
Fuente:https://www.elsol.com.ar/mendoza/sequia-extrema-y-olas-de-calor-el-panorama-para-el-verano-en-mendoza
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