El 24 de julio de 2019, cuando se celebró la primera «cuenta regresiva» de los Juegos programados para 2020, hubo fuegos artificiales sobre la Bahía de Tokio.
Los organizadores de los Juegos llevaron adelante el acto de la «cuenta regresiva» sin público, debido a que la capital japonesa se enfrenta una segunda oleada de Covid-19, con el crecimiento de casos diarios.
«Tokio celebró con discreción y sobriedad el inicio de la cuenta regresiva para sus Juegos Olímpicos, pospuestos para 2021 pero que debieron realizarse este año, siendo que el coronavirus aún es la principal amenaza incluso luego de la reprogramación», publicó el periódico español Mundo Deportivo.
A diferencia de la ceremonia realizada hace un año, los organizadores de los Juegos de Tokio llevaron adelante el acto sin público, debido a que la capital japonesa se enfrenta una segunda oleada de Covid-19, con el crecimiento de casos diarios.
El 24 de julio de 2019, cuando se celebró la primera «cuenta regresiva» a un año vista de los Juegos programados para 2020, hubo fuegos artificiales sobre la Bahía de Tokio y las autoridades locales revelaron el diseño de las medallas en un espectáculo que incluyó coreografías y la presencia de deportistas japoneses.
«Nadie sabe cómo será el mundo en julio y agosto de 2021. Es por eso que debemos prepararnos para varios escenarios con la salud de todos los participantes como prioridad», dijo la semana pasada el presidente del COI, el alemán Thomas Bach.
Las fronteras de Japón permanecen actualmente cerradas para los ciudadanos de 129 países con el fin de mitigar los efectos del coronavirus y se analiza reabrir cuando los casos hayan disminuído en forma considerable, agregó Mundo Deportivo. Telam
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