¿Se acuerdan cuando la artista dejó a todos boquiabiertos con su escote pronunciadísimo?
Sin embargo, años atrás no era aún mundialmente conocida y buscaba hacerse notar. Aunque, convengamos: desde el inicio, jamás pasó desapercibida. Su físico envidiable, su mirada intensa y los peinados sauvage siempre la destacaron entre otras figuras.
A la hora de lucir sus cualidades en la alfombra roja, su look podría ser definido como provocador y súper sexy. Pero hubo una ocasión que será recordada como emblemática por lo impactante de su vestido. Y ella, más tarde, admitió que se jugó a todo o nada. En aquella oportunidad la cantante y actriz admitió: «Quise vestir de modo tal que todos repararan en mí».
Fue en la entrega de Premios Grammy del año 2000. Jennifer eligió un vestido verde esmeralda de chifón transparente con estampado jungle que fue comentario en todos los medios masivos y lo sigue siendo hoy. Criticado y venerado, lo cierto es que marcó un hito. Lo llamativo del diseño by Versace era el escote que terminaba… ¡debajo del ombligo!
Con una tela verde y turquesa floreada transparente, la hermosa Jennifer mostraba todo excepto una diminuta bombacha. Su espalda estaba descubierta hasta el coxis, sus piernas, del muslo al tobillo y su pecho, casi completamente al aire. El revelador escote, era una amplia V corta que terminaba debajo del ombligo, que cerraba con un broche brillante. Parecía que iba a desarmarse en cualquier momento, y muchos lo calificaron como un crimen de moda, pero la exjurado de American Idol aseguró que volvería a usar un modelo así.
Hasta ese entonces, sólo era conocida como actriz por su película Selena, de 1997, que relataba la vida y trágica muerte de una cantante texana, pero tan sólo tres años después, esta aparición pública coincidiría con la explosión de su música en todos los charts. Grabó su primer álbum, On the 6, en 1999 y en el 2001 ya era récord de ventas su segundo disco.
Provocativa y audaz, logró que todos los radares la apuntaran y tanto, que le guarda un cariño especial y lo sigue conservando en su guardarropas, según contó en una reciente entrevista a la revista W. Allí López recuerda: «Habíamos visto con mi estilista algunos vestidos para el evento y ninguno era el correcto. El me dijo en un momento, hay otro vestido, pero otras personas lo usaron. Me lo probé y decidí usarlo pese a eso. Me sorprendió la reacción que suscitó. Cuando subí al escenario con David Duchovny, que era la estrella más grande en ese momento, le dijo a la audiencia, nadie me está mirando a mí, y cuando volví a mi asiento sentí como un fuerte rugido en todo el salón, todos hablaban de mi vestido. Me senté y dije ¿cuál es el problema? Estaba sorprendida».
En plena era de Lady Gaga y otras celebrities cuyos atuendos fuerzan los límites de lo excéntrico, puede no parecer demasiado, pero hace 13 años, el diseño llevaba la sensualidad a otro nivel.
Aunque con un estilo más refinado, su vida sigue llena de emociones a los que la diva de 44 años y espectacular estado físico aporta los más espectaculares atuendos. Se la vio el mes pasado con una espléndida falda salmón hasta los tobillos para descubrir su estrella en el paseo de la fama de Hollywood y hermosamente enfundada en un deslumbrante catsuite dorado durante su presentación en los Premios Juventud 2013. Allí recibió el galardón como Icono Mundial. Eso sí, al parecer, el mundo no olvidará fácilmente el más extravagante y famoso vestido que haya usado jamás.
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