Se trata del Complejo Volcánico Planchón-Peteroa que está en el sur de la provincia y se encuentra en el nivel amarillo desde julio. Las imágenes que registraron el momento de la expulsión de los gases
Un nuevo registro de actividad en el Complejo Volcánico Planchón-Peteroa, en la provincia de Mendoza, quedó registrado por las cámaras de Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR) que mostró como una nube de ceniza de más de 1.000 metros se elevó por la Cordillera de los Andes.
El evento de mayor intensidad se produjo a las 09:58 del jueves 6 de noviembre, cuando un pulso de emisión de gases y material particulado fino emergió desde el cráter del complejo, alcanzando aproximadamente 1.100 metros por encima del nivel de la cumbre. La columna de cenizas y gases volcánicos se desplazó en dirección sur-sureste, según lo informó el Servicio Geológico Minero Argentino mediante un reporte difundido por el Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica. Las imágenes captadas por las cámaras instaladas en las inmediaciones ofrecieron un registro visual de cómo se desarrolló el fenómeno.
El seguimiento sísmico incluyó análisis de RSAM (amplitud sísmica en tiempo real) y espectrogramas que reflejaron las particularidades de la señal tipo Tremor (TR). Dichos instrumentos permitieron corroborar la ausencia de anomalías mayores fuera del cambio puntual detectado la noche anterior. Desde las 21:15 del miércoles, también fue posible observar mediante cámaras la presencia de columnas bajas de gases y pequeñas fracciones de ceniza, señales de una intensificación gradual en la actividad superficial que tuvo su punto álgido en el pulso registrado cerca de las 10 de la mañana.

El organismo nacional consignó que la columna volcánica afectó fundamentalmente el entorno inmediato al Planchón-Peteroa y que, hasta el momento, no hubo reportes de impacto en áreas pobladas o centros urbanos próximos. Tanto SEGEMAR como el Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur (OVDAS) de Chile mantienen vigilancia constante y trabajan en conjunto para actualizar los informes de situación. El nivel de alerta técnica permanece sin modificaciones y se ubica en amarillo, el cual implica atención reforzada debido al estado interno del volcán, aunque sin indicar una erupción inminente a gran escala.
El reporte oficial subrayó que, pese a considerarse la actividad dentro de parámetros moderados, no puede descartarse la ocurrencia de nuevos episodios de emisión de ceniza o explosiones de baja a mediana energía en el corto plazo.
El Complejo Volcánico Planchón-Peteroa tiene una antigüedad aproximada de 200.000 años. Uno de los episodios más impactantes de su historia geológica ocurrió hace unos 12.000 años, cuando se produjo el colapso de la mitad occidental del volcán Planchón, generando la mayor avalancha de rocas documentada en época reciente en el curso alto del río Claro, en el sur de Chile. Esta avalancha formó un anfiteatro de gran tamaño abierto hacia el oeste, zona donde se concentraron las erupciones y la formación de cráteres en los últimos 10.000 años, caracterizadas por explosiones freatomagmáticas, caídas piroclásticas y la presencia de cuerpos de lava y escoria.
En registro histórico, desde aproximadamente los años 1600, existen documentos y crónicas que consignan entre 15 y 20 erupciones, la mayoría de ellas de baja explosividad. Los episodios mejor documentados corresponden a los eventos de 1991, el ciclo eruptivo de 2010-2011 y la erupción más reciente, iniciada el 14 de diciembre de 2018, que se extendió hasta 2019.
Fuente:https://www.jornadaonline.com/mendoza/alerta-en-mendoza-el-volcan-peteroa-registra-actividad/

