
La Cámara de Diputados convirtió en ley un proyecto impulsado por el Gobierno provincial que declara la emergencia del Sistema Hidroeléctrico “Los Nihuiles” por el plazo de 14 meses. Con la norma sancionada, la Provincia puede disponer medidas urgentes, ente ellas, licitaciones para obras y estudios de evaluación del daño que generó la tormenta sobre esa zona de San Rafael ocurrida a principios de enero.
La votación resultó favorable con 29 votos afirmativos, 16 negativos y 2 diputados ausentes. A favor, votó Cambia Mendoza y dos aliados, Gustavo Cairo (La Libertad Avanza) y Mauro Giambastiani (Mejor Mendoza). En contra lo hizo el peronismo, José Luis Ramón (Consumidores y Ciudadanos), Graciela Lizana (Renovador Mendoza), Emanuel Fugazzotto (Partido Verde) y La Unión Mendocina.
En los argumentos, el oficialismo expuso la crítica situación de “los sistemas hidroeléctricos ubicados sobre los ríos Atuel y Diamante, como consecuencia de los daños de extrema gravedad provocados por un evento natural extraordinario“. Así, hicieron referencia a la intensa precipitación de agua en un corto período que ocasionó la salida de servicio de las centrales Nihuil II y Nihuil III, el 11 de enero de 2025.
Debido a este temporal, resultaron afectadas las playas de transformación, los equipos auxiliares y de servicio, impactando en el sistema eléctrico en los departamentos de San Rafael, Malargüe y General Alvear.
La ley sancionada permite al Gobierno restablecer el funcionamiento seguro y eficiente del sistema, a través de “una serie de medidas urgentes“.
En primer lugar, el Ejecutivo quedó facultado para realizar relevamientos especializados y una evaluación detallada de los daños existentes, con estimaciones técnicas y económicas para su reparación y puesta en funcionamiento.
Así, se abre la puerta para una nueva licitación a cargo de la Provincia.
“Posteriormente, será imprescindible ejecutar las obras necesarias, las cuales implicarán una considerable complejidad logística“, por tratarse de zonas montañosas.
Como el fenómeno meteorológico fue “imprevisible” y “generó consecuencias que afectaron el riesgo asumido por las partes en el contrato de concesión“, el oficialismo consideró que se “impone una carga compartida, obligando a replantear los plazos previstos para la transición, y priorizar la evaluación exhaustiva del estado actual del sistema hidroeléctrico, resultando imposible la conclusión del período de transición conforme lo originalmente estipulado“.
De esta manera, contempló la posibilidad de otorgar una nueva concesión de operación por un plazo de hasta 30 años, con cláusulas que aseguren el control provincial sobre el recurso, la adecuación de los cánones y regalías, y el cumplimiento de estándares ambientales.
La norma aprobada dispone “la continuidad del período de transición establecido por los decretos 1021/24 y 1085/24, a cargo de la empresa HINISA, hasta tanto se verifique el cumplimiento total de las obligaciones emergentes del Contrato de Concesión con Hidroeléctrica Los Nihuiles S.A., relativo al uso hidroeléctrico de las aguas del Río Atuel y otros bienes de dominio de la Provincia“.
También se autoriza la “continuidad del uso hidroeléctrico de las aguas del Río Diamante y la generación de energía eléctrica a partir del uso del recurso hídrico, conforme a lo establecido por la Ley nº 6497, a cargo de la empresa HIDISA, hasta tanto se verifiquen las obligaciones contractuales asumidas en el marco del Contrato de Concesión con Hidroeléctrica Diamante S.A.“.
Críticas de la oposición
Desde el radicalismo, Jorge López explicó la razón de la ley porque “no se había identificado un fenómeno meteorológico de estas características en esta zona, generando un caudal de más de 1.500 metros cúbicos por segundo, lo que dejó fuera de servicio las centrales hidroeléctricas Nihuil II y III, debido a los daños no solamente en la zona de máquinas y de las turbinas, sino también en los sectores de playas de transformación, los equipos auxiliares y los equipos de servicio“.
El diputado radical recordó que, cuando se diseñaron los Nihuiles, se hizo ya con un caudal excepcional histórico, de 600 m3. López fundamentó la emergencia ante “hechos imposibles de prever y con impacto en la sociedad, el ambiente, y el tema energético“.
Pero la iniciativa no fue acompañada por La Unión Mendocina, el peronismo y el Partido Verde.
Jimena Cogo (PRO), rechazó la norma por considerar que todavía “faltan respuestas y un plan que nos aclare cuáles van a ser las acciones, contrataciones y cuáles los recursos para dar soluciones a lo que pasó con evento desastroso“.
Cogo expresó que aún no se han podido identificar y cuantificar los daños totales por lo que se debería esperar hasta que “los informes sean terminados“.
En el peronismo, Gustavo Perret sostuvo que hay artículos de la ley que “no son transparentes ni claros“, y recalcó que “han pasado más de cuatro meses desde que ocurrió este hecho, donde hubieron serios daños, se inundaron las centrales hidroeléctricas y hasta hoy no se pueden cuantificar los daños“.
Emanuel Fugazzotto (PV) también se manifestó en contra de la norma, porque advirtió que “se aprovecha la crisis en la prestación del servicio, se incluye la concesión y contrataciones directas. Tampoco dicen que esto se hará para mejorar el servicio. Es un cheque en blanco al Ejecutivo; no se ha aportado a la transparencia”.
Fuente;https://www.elsol.com.ar/mendoza/los-nihuiles-con-la-emergencia-aprobada-el-gobierno-podra-avanzar-con-nuevas-licitaciones/





