“…Yo llegué más o menos en el año 58’al paraje Capitán Montoya, me trajeron mis padres …yo venía a cursar libros a la escuela Amador Burgos… – éste entre otros fueron los emotivos recuerdos con los que un vecino de la zona, don Patrocinio Miranda, nos hizo una pintura de lo que fueron los inicios de nuestro amado distrito.

Todos estos festejos, se llevaron a cabo en el acto realizado este fin de semana pasado en el boulevard de Capitán Montoya.

Nosotros también desde nuestra comunidad educativa “Fortín 25 de mayo”, queremos destacar que el sábado 24 de agosto, tuvimos el placer de participar en los agasajos de los 203 años de vida del distrito Las Paredes; al cual pertenecemos y que orgullosos asistimos con nuestras banderas de ceremonia (Nacional y Provincial), acompañadas por la señora directora Gladys Beatriz Corvalán acompañada de la Prof. Elsa Viviana Ureta destacadas vecinas de la zona.

Efectivamente nuestro CEBJA funciona en este antiguo distrito, así es como el aula núcleo está en El Toledano Norte (escuela Juan Palma), y tenemos dos aulas satélites, una en ruta 143 y Bentos, en la finca de la familia Bianchi y otra en Montoya junto a la sede distrital.

¿Conocemos su historia?

Originalmente, los pobladores de este lugar lo llamaban «Las Polvaredas» debido a su fisonomía de inmensas llanuras con ondulaciones medanosas de montes achaparrados y la clásica flora que el secano produce en medio del desierto. Cuando llegaron los primeros pobladores, el 19 de agosto de 1821, Las Paredes se convirtió en el segundo distrito más antiguo del sur mendocino. Su colonización estuvo a cargo de los ingenieros Federico Barrera y Abelardo Tabanera.

Este distrito es la entrada a San Rafael por el oeste y su nombre, según el historiador Augusto Marcó del Pont, se debía a que la mayoría de las propiedades estaban cercadas con tapiales de barro y caña, que a la distancia parecían paredes. Con el correr de los años y el crecimiento de la región, que sumó a la agricultura la instalación de bodegas e industrias conserveras, fueron creciendo parajes como El Toledano, El Chañaral, Colonia Iaccarini, El Usillal, Los Maitenes, Capitán Montoya y Los Filtros.

Un distrito pujante

En la actualidad, alberga bodegas de renombre como Casa Bianchi, a la que visitó la Presidente para dejar inaugurada su nueva línea de embotellado, y otros establecimientos como Salafia, Murville y la antigua Suter, cuyas acciones ya no están en poder de la familia fundadora.

A la vez, allí funciona la aceitera Zingaretti, una empresa centenaria dedicada a la elaboración de aceite de oliva bajo la marca «Yancanelo«. La elección de esa forma de escribir el nombre de la laguna ubicada en Malargüe: “Llancanelo”; fue para competir en el mercado con otra marca emblemática.

Un lugar privilegiado

Su perfil ha ido cambiando con los años, y hoy es un lugar elegido por muchos sanrafaelinos para construir sus viviendas en un entorno más tranquilo y relativamente cercano a la ciudad. Por tal motivo, muchas fincas se han parcelado para convertirse en loteos, en donde se han asentado barrios privados y casas de fin de semana.

 De alto vuelo

A su vez, Las Paredes es, el lugar donde se ubica el aeropuerto local bautizado «Santiago Germanó» en honor a un aviador pionero de la aeronavegación regional y el Autódromo Las Paredes, en el que se han disputado fechas de las categorías mayores del automovilismo nacional y es escenario de los clásicos torneos regionales.

Un punto de encuentro

 Además, está vinculado a la ciudad por una ciclovía que llega desde la zona urbana hasta la rotonda conocida como «Cristo de Las Paredes«, en la que está emplazado uno de los primeros monumentos que se construyeron en el país en homenaje a los héroes de Malvinas.

En el mismo hay varias placas de mármol con los nombres grabados de quienes dieron su vida por la Patria en 1982. Allí se conmemora, cada 2 de abril, la gesta conocida como «Guerra del Atlántico Sur«.

Muchas son las familias que eligen este hermoso lugar para tomar matecitos y aire puro, comerse un rico asadito entre amigos o simplemente compartir una charla amena.

Consideramos oportuno destacar, que los Paredinos son vecinos con proyectos visionarios que les resulten beneficiosos; para seguir creciendo como una comunidad pujante y unida en el deber y sentir ciudadano.