Son 65 libros en total, de los cuales los más antiguos datan de 1906. Entre ellos, además, se encuentran 11 tomos que registran jornales de obreros -toneleros, carteros, personal de bodega- y que abarcan el período de 1915 a 1930.

Este viernes, en el Archivo General de la Provincia, la ministra de Cultura y Turismo, Nora Vicario y el intendente de Godoy Cruz, Tadeo García Zalazar, firmaron un acta de entrega de documentos históricos pertenecientes a la ex Bodega Arizu. Posteriormente se trasladaron al edificio patrimonial para realizar un recorrido por las instalaciones.

El Ministerio de Cultura y Turismo, a través del Archivo General de la Provincia, hizo entrega del reservorio documental de la ex Bodega Arizu, para guarda y administración de la Municipalidad de Godoy Cruz y gestión de la filial de ese departamento de la Junta de Estudios Históricos de Mendoza.

Se trata de 65 piezas documentales que ingresaron al Archivo General, en el contexto de las investigaciones que realizó la doctora Ana María Mateu sobre Balbino Arizu y la etapa fundante de la bodega, material volcado en su tesis doctoral y en la posterior publicación de un libro, en 2020, por la Editorial de la Universidad Nacional de Cuyo (EDIUNC).

En ese contexto, la doctora Mateu dejó en guarda este importante reservorio documental al Archivo General de la Provincia y fue entregado a la Municipalidad, con el fin de acrecentar los valores patrimoniales de la obra de restauración y puesta en valor de los edificios de la antigua bodega, Patrimonio Cultural de la Municipalidad, la Provincia y Monumento Histórico Nacional.

Al respecto, la ministra de Cultura y Turismo de Mendoza, Nora Vicario, destacó que: “El Archivo General de la Provincia cumple una importante labor de resguardo y conservación de bienes documentales y patrimoniales, como una forma de proteger la historia de la provincia y su estudio. En particular, estos archivos de la ex bodega Arizu documentan la historia de la vitivinicultura y la vida industrial y laboral del pasado de Mendoza. Por eso, es muy valioso que este material se incorpore al archivo de la antigua bodega como parte del rescate patrimonial del futuro Museo Cultural y del Vino”.

Luego de la firma del acta protocolar, los funcionarios se trasladaron a la ex Bodega Arizu y realizaron un recorrido por las instalaciones con el fin de mostrar los trabajos de restauración que se llevan adelante y el sitio donde se instalará el reservorio documental.

Por su parte, el intendente de Godoy Cruz, Tadeo García Zalazar, expresó: “Es un momento histórico dentro del proceso de recuperación patrimonial de Bodega Arizu. Estos son libros y archivos de distintos tipos de documentación que existían en la bodega y que una investigadora de la UNCuyo y el Archivo General de la Provincia han custodiado todos estos años en que la bodega estuvo en estado de abandono, desde que se declaró Patrimonio, a fines de los noventa, hasta que comenzó su expropiación en 2018”.

Horacio Chiavazza, director de Patrimonio Cultural y Museos de la Provincia, destacó cada una de las colaboraciones, particulares, académicas y estatales, que hicieron posible la cristalización de esta iniciativa, que tiene como objetivo garantizar la preservación para uso público de la memoria documental de Mendoza. Remarcó, además, que estas acciones contribuyen al acrecentamiento de los bienes patrimoniales, lo que definió como un círculo virtuoso a partir del cual la acción de particulares se amalgama con el interés de las instituciones, en pos de garantizar a la sociedad en general la preservación de su memoria.

Los documentos históricos

Son 65 libros en total, de los cuales los más antiguos datan de 1906. Entre ellos, además, se encuentran 11 tomos que registran jornales de obreros -toneleros, carteros, personal de bodega- y que abarcan el período de 1915 a 1930.

Se suman también 7 libros de planillas de peones, carreros, jornaleros y personal de bodega, entre 1910 y 1913, 1920 y 1922, 1924 y 1929 y, por último, 1940 y 1944.

Por otro lado, se entregaron 17 libros de Registro de personal de las fincas La Perla, Chachingo, Barrancas y Las Palmas, entre 1908 y 1932.

Particularmente de la Bodega Barrancas, el material existente refiere a 17 libros sobre la evolución de la empresa -libros diarios, comprobantes de caja, salidas de caja, libro mayor, letras a pagar, cuentas corrientes, y estadístico.-, entre 1906 y 1943.

Por último, se cedieron 13 libros sobre mercado de vinos -expediciones, embotellamiento, salidas de vino- entre 1909 y 1932, y 1976 y 1978.

Recorrido por el Espacio Arizu

El recorrido por la ex Bodega Arizu se realizó en tres etapas. La primera de ellas, a cargo de Érica Pulido, secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Municipio, quien detalló el proceso de obra en la refuncionalización del edificio.

De esta manera, se brindaron detalles de las obras en el Espacio Arizu, que están cada vez más avanzadas y contemplan lo que será el Museo Cultural, del Vino y el salón de exposiciones y congresos.

Este espacio patrimonial consta de 3.000 metros cuadrados, compuesto por seis naves sobre las cuales se están realizando trabajos de refuerzos estructurales, techos, cableado y canaletas. Se están interviniendo en una primera etapa las primeras tres naves, particularmente en colocación e instalación de aire acondicionado, refrigeración e iluminación. Estos trabajos se realizan de acuerdo con un estudio previo con el fin de preservar su configuración patrimonial.

El segundo espacio visitado fue el Archivo Histórico de la ex bodega, donde funciona la Junta Histórica Municipal, a cargo de un grupo de historiadoras que tiene como misión preservar los documentos históricos y el análisis de todo el material encontrado en el marco de la adquisición por parte del Municipio. Archivos que, mayoritariamente, referían a registros económicos, financieros y datos de obreros. Desde hoy, ese patrimonio cultural se acrecentará con los documentos históricos cedidos desde el Ministerio de Cultura y Turismo de la provincia.

Por último, los funcionarios visitaron las instalaciones de lo que fue la antigua casona de la familia Arizu, ubicada en calles San Martín y Minuzzi, un punto estratégico del departamento de Godoy Cruz y que guarda la historia de una de las familias que contribuyeron a la transformación de la industria vitivinícola de nuestra provincia.