El ministro de Economía, Sergio Massa, volverá a intensificar esta semana su agenda internacional. El miércoles partirá hacia Washington, EEUU, donde participará de la Asamblea Anual del Fondo Monetario y el Banco Mundial y tendrá una primera inmersión en la reunión de ministros de Finanzas del G20, preparatoria de la Cumbre de Presidentes que tendrá lugar un mes más tarde en Indonesia.

Con todo, lo más importante que Massa necesita definir del modo más preciso y firme posible es la negociación de la deuda pendiente con el Club de París, que junta las cabezas de gobiernos y agencias gubernamentales con acreencias sobre la Argentina y otros países en desarrollo.

El viaje a Washington tiene una fuerte impronta macro e internacional. Esta vez no acompañarán al ministro Massa funcionarias como la secretaría de Energía, Flavia Royón, ni la de Minería, Fernanda Ávila, como lo hicieron en su visita a Houston, suerte de meca petrolera de EEUU. A tono con la agenda y los objetivos, serán de la partida Leonardo Madcur, jefe de Asesores, el secretario de Programación Económica, Gabriel Rubinstein, y el asesor en temas internacionales, Gustavo Martínez Pandiani. Y está en duda la presencia de Marco Lavagna, el director del Indec, que el viernes debe informar el dato de inflación de septiembre, que otra vez rondaría el 7 por ciento.

Kiciloff, en 2014, cuando hizo la renegociación express de la deuda con el Club de París, Rápida, pero cara.

A diferencia de Kicillof en 2014, Massa llega a la renegociación con el G20 teniendo detrás un acuerdo vigente con el FMI, lo que facilita las cosas. De hecho, esta semana el BCRA recibirá USD 3.800 millones cuyo desembolso el directorio del Fondo aprobó el viernes. Uno de los pedidos expresos incluidos en los documentos que difundió el organismos fue que el gobierno acordara de una vez con el Club de París cuándo y cómo va a pagar el saldo deudor, que Guzmán dejó como tercera y última etapa de su gestión en 3 etapas: primero restructurar la deuda con acreedores privados, después acordar el FMI y al final con el club parisino. Hizo varios periplos a la capital francesa y tenía uno programado para la semana siguiente a aquella en que, intempestivamente, presentó su renuncia.

Cualquier negociación con el Club de París estará inextricablemente ligada al acuerdo con el Fondo cuyo punto más sensible es, precisamente, la administración de las escasísimas reservas del Banco Central. De hecho, el Staff Report que el Fondo publicó en la noche del viernes pasado dice expresamente: “Se necesitan esfuerzos continuos de buena fe, de todas las partes, para asegurar una reestructuración exitosa de la deuda del Club de París”. Además, en un escrito adjunto al documento del FMI el representante argentino ante el organismo, Sergio Chodos, aseguró: “Nuestras autoridades han retomado las negociaciones con el Club de París y nuestro objetivo es llegar a un acuerdo en los próximos meses, con base en un cronograma de pago que sea consistente con nuestra capacidad de pago y sostenibilidad de la deuda”.

Acreedores y accionistas

Ese paquete, explicaron a Infobae fuentes oficiales, “probablemente” esté en la agenda de miércoles, jueves y viernes de Massa en la capital norteamericana. De hecho, más de la mitad de la deuda argentina al Club de París está concentrada en dos países: Japón (22%) y Alemania (37%) que son, respectivamente, tercer y cuarto accionista del FMI, detrás de EEUU y China. Los otros acreedores oficiales en el Club son los estados o agencias gubernamentales de Holanda (casi 8%), España (6,68%), Italia (6,29%) y EEUU 6,28%).

“Se necesitan esfuerzos continuos de buena fe, de todas las partes, para asegurar una reestructuración exitosa de la deuda del Club de París” (Fondo Monetario Internacional)

“La misión apunta a consolidar apoyos para seguir avanzando con la hoja de ruta para la estabilización de la economía argentina, fortalecer las reservas a través de más mercados para las exportaciones nacionales y promover más inversiones productivas en sectores estratégicos como energía, gas, agroindustria, proteínas, servicios basados en el conocimiento y minería”, afirmaron a Infobae fuentes oficiales.

En la hoja de ruta aparecen reuniones de trabajo del Comité Monetario y Financiero Internacional, así como también de las actividades en el marco del Comité de Desarrollo. La agenda incluirá además actividades en el marco del G20 como la reunión ministerial y “un encuentro cerrado promovido por India, país que ostentará la presidencia del G20 el próximo año”, explicaron.

Momento de decisión

De hecho, la tenida de ministros del G20 en Washington es preparatoria de la Cumbre de Presidentes del mismo grupo que tendrá lugar en Bali, la principal isla de Indonesia, el 15 y 16 de noviembre (Bali, vale recordar, fue el objetivo del más feroz ataque terrorista posterior al 11S en EEUU: tuvo un saldo de 187 muertos). En la previa, además, Argentina debería clarificar su posición de si está de acuerdo con excluir o no a Putin (esto es, a Vladimir Putin) del encuentro, al que EEUU propuso que se invite al presidente de la invadida (por Rusia) Ucrania, Volodimir Zelensky. Sería extraño que luego de ofrecerle a Putin que la Argentina sea la “puerta de entrada de Rusia a América Latina”, le cierre la del G20, que Rusia integró desde su origen.

En Washington, Massa mantendrá encuentros con autoridades económicas de América del Sur y México organizados por Ilan Goldfajn, Director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, y tendrá una sesión de trabajo bilateral con Gita Gopinath, Subdirectora Gerente del Fondo Monetario Internacional”, detallaron desde el Palacio de Hacienda.

Bilaterales

Habrá, además, encuentros bilaterales con pares del G20, como Rogelio Ramírez de la O (México), Nureddin Nebati (Turquía), Nadia Calviño (España), Paulo Guedes (Brasil) y con Pascal Saint-Amans, Presidente del Comité Asuntos Fiscales de OCDE, Paolo Gentiloni, Comisario de Economía de la Unión Europea, y con autoridades del Banco Europeo de Inversiones (BEI). También formará parte del conversatorio de Ministros de Finanzas organizado por el BID junto a sus pares Mario Marcel (Chile), José Antonio Ocampo (Colombia), Rogelio Ramírez de la O (México) y Azucena Arbeleche (Uruguay).

“Finalmente, tendrá un encuentro de trabajo con representantes del gobierno de EEUU y con ejecutivos de empresas estadounidenses con negocios e inversiones productivas en la Argentina, organizado por el Atlantic Council, uno de los think tanks locales más influyentes a nivel global”, aseguraron cerca del jefe de Hacienda.

Massa llegará, además, pronto a cumplir uno de los pedidos que el FMI le hizo el viernes pasado: un “mejor” (léase, más estrecho) control de las importaciones. Se trata del Sistema de Importación de la República Argentina (SIRA), un sistema que entrará en vigencia el lunes 17 y permitirá un análisis de la Capacidad Económica y Financiera del Importador, trazará un “Perfil de Riesgo Aduanero y Fiscal”, en función de sus antecedentes en materia de sobrefacturación de importaciones y uso abusivo de cautelares o presentación de falsas Declaraciones Juradas, y dará fechas precisas de acreditación de divisas a los importadores. La idea, en cualquier caso, es mantener al nivel más alto posible el superávit comercial para, por esa vía, recomponer las reservas del Banco Central.

Fuente:https://www.infobae.com/economia/2022/10/10/massa-con-perfil-internacional-vuelve-a-washington-fmi-g20-y-club-de-paris-en-la-agenda/