La apuesta por Sergio Massa como nuevo ministro de Economía puede ser la última oportunidad para paliar la crisis del país
Sin dinero fresco, ha financiado su déficit fiscal con emisión monetaria, mientras las reservas del Banco Central se secan y la inflación se dispara. Las previsiones para este año están por encima del 80% de subida del IPC. El descalabro dilapida cualquier posibilidad del oficialismo en las generales de octubre de 2023. El peronismo se ha abrazado al nuevo ministro como si fuese un salvador, pese a su baja popularidad entre el electorado y el sarpullido que levanta entre sus pares. Massa fue jefe de gabinete de Cristina Kirchner, pero luego hizo campaña como candidato presidencial prometiendo que la metería presa por corrupción. Pese a su “traición” —el peronismo es intransigente con los díscolos—, volvió en 2019 al seno del kirchnerismo.
Está por ver si el país se halla aún a tiempo de remontar la pendiente y, sobre todo, si la política acompañará los sacrificios que vienen. Massa tiene una sola oportunidad, y a Argentina se le acaba el tiempo.
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