9 recetas fáciles para hacer leche vegetal casera

De almendras, soja, coco u otros ingredientes, son una alternativa para evitar la proteína animal, por motivos ideológicos o por intolerancia a la lactosa.

Las leches vegetales se hacen a base de frutos secos y semillas.

Cada vez es más común ver opciones de leches de origen vegetal, tanto en cartas de cafeterías como en supermercados y dietéticas. Incluso hasta las marcas más conocidas de lácteos vacunos están incursionando en el rubro con productos de esta línea. Pero preparar una leche vegetal en casa siempre resulta más económico.

¿Qué se necesita para hacerlas? Muy poco. Un bol, una licuadora, una bolsa para filtrar, una botella, agua filtrada/potable y el ingrediente principal que será la base de la bebida.

Cómo preparar leche vegetal en casa

Los frutos secos son ricos en nutrientes.

Lo primero que hay que hacer es lavar el ingrediente base (almendras, nueces, pistachos, girasol, etc) elegido para eliminar las micro toxinas que pudieran estar depositadas en las hendiduras. Puede ser con agua sola o sumarle una cucharada de agua oxigenada de 10 volúmenes por cada litro de agua. Luego se cuela y se enjuaga.

El tiempo que se deja el ingrediente en remojo es variable de acuerdo con el ingrediente elegido, por eso hay que tener en cuenta la receta en cada caso.

Tipos de leche vegetal

El abanico es amplio. Leche de almendras, nueces, pistachos, girasol, sésamo, alpiste, arroz, soja… hasta de ¡pasta de maní!

Esa base se puede emplear para preparar otro tipo de bebidas a base de «lácteos» vegetales, como la chocolatada (que lleva un fruto seco de base y cacao, por lo general endulzado con dátiles) o la Golden milk o leche dorada. Esta última tiene una base de leche vegetal con el agregado de cúrcuma, pimienta y se saboriza a gusto con miel o el endulzante que más les guste. Puede incluir también jengibre y cardamomo.

Los frutos secos son un pilar importante de la alimentación basada en plantas.

Cómo conservar la leche vegetal

El chef Pablo Martín cuenta que las leches vegetales caseras o naturales -elaboradas de manera artesanal- duran entre tres y cuatro días. Sin embargo, si se quiere aprovechar al máximo sus nutrientes hay que consumirlas en las primeras 24 horas. Se conservan en la heladera, en una botella de vidrio, siempre tapada con un corcho o tapa a rosca.

“Se pueden freezar pero es más engorroso tener que descongelarlas que hacerlas frescas en el momento. Mi sugerencia es activar una gran variedad de semillas, unos cuatro o cinco puñados, retirar una parte para hacer la leche y al resto seguir conservándolo en el frasco (siempre en la heladera) y sumar más agua. Al día siguiente, realizar la misma acción, hasta terminar los frutos secos”, aconseja el cocinero.

¿Cuál es la mejor leche vegetal?

Desde el punto de vista nutricional, el chef Pablo Martín considera que la mejor leche vegetal es la de alpiste ya que es ideal para frenar la diabetes, tiene todos los aminoácidos esenciales para formar una proteína completa y quema grasas. Se realiza utilizando ocho cucharadas de alpiste para consumo humano por litro de agua. En este caso, Pablo sugiere limpiarlas bien antes de activarlas con vinagre de alcohol si son semillas orgánicas y, de no serlo, con una cucharadita de bicarbonato de sodio.

Ya sabemos todos los secretos para producir leches vegetales caseras, entonces; sólo falta poner los datos en marcha y crear nuestras propias mezclas, uniendo las leches con frutas y vegetales para vivir una primavera a puro licuado natural.