El gobernador Rodolfo Suarez viajará este jueves a la Ciudad de Buenos Aires para participar de una reunión extraordinaria con otros mandatarios provinciales, convocada por el presidente Alberto Fernández. La cita no es menor, porque rompe con el aislamiento ordenado a nivel nacional: Fernández les dará detalles sobre la renegociación de la deuda y la oferta con el recorte que le ofrecerán a los bonistas. 

Desde que Fernández instrumentó en marzo pasado el aislamiento social, preventivo y obligatorio, no hubo vuelos comerciales en todo el país, salvo aquellos que traían de vuelta a argentinos repatriados desde distintos puntos del globo.

La última vez que el presidente convocó a los gobernadores fue el 19 de marzo. Luego, cuando se analizó la  extensión de la cuarentena hasta el 26 de abril, la discusión fue por videoconferencia. Así, Suarez siguió la reunión desde su despacho en el cuarto piso de Casa de Gobierno o desde la residencia oficial en La Puntilla.

Pero ahora, por el tenor de las decisiones que pesan sobre el funcionamiento del país, los 24 mandatarios tendrán que volar a la Ciudad de Buenos Aires.

Como la Provincia no tiene avión propio, Suarez viajará en una aeronave privada que le concedieron empresarios en medio de la emergencia sanitaria y por el que la Provincia tendrá que pagar el costo del uso: combustible, pilotos y el seguro correspondiente, según explicaron desde la gobernación.

En este caso, Suarez viajará solo, sin ningún otro funcionario, para respetar las restricciones de la distancia social.

A las 17 está pautada la decisiva cumbre. Fernández buscará mostrar el respaldo de los gobernadores ante los acreedores externos en el inicio de las negociaciones, y ante quienes pedirá una importante quita de la deuda que asciende a 68 mil millones de dólares, en medio de la crisis mundial que impuso la pandemia de coronavirus. En esa cita, también estará el ministro de Economía, Martín Guzmán, que este viernes hará la oferta del Gobierno nacional.