Bajo la dirección de César Lara, la Orquesta Filarmónica de Mendoza se presentará el jueves 1 de agosto, a las 21.30, en el Teatro Independencia.

En esta ocasión, los músicos interpretarán obras de Jorge Horst, Alban Berg y Richard Strauss, con el violinista Wolfgang David y el Coro de Niños Cantores de Mendoza como invitados.

La Secretaría de Cultura invita a un nuevo concierto de la Orquesta Filarmónica de Mendoza, con la dirección de César Lara, junto con el solista Wolfgang David, en violín, y el Coro de Niños Cantores de la provincia.

Brindarán un concierto en el teatro mayor de los mendocinos, en el que interpretarán las obras: Tuhún, de Jorge Horst; Violín Concerto o A la memoria de un ángel, de Alban Berg, y Muerte y transfiguración, de Richard Strauss.

La entrada general tendrá un precio de $150 y será gratuita para jubilados y estudiantes. Podrán adquirirse en la boletería del teatro de martes a sábados de 15 a 21 o a través de entradaweb.com.ar.

El repertorio

El director remite en el título al más allá por la temática que aborda la compilación de obras que interpretarán los artistas.

Tuhún es una partitura del compositor Jorge Horst. Ella está dedicada a “todos los pueblos originarios, en la memoria, presente y futuro; la intención fundamental es homenajearlos de la manera más profunda, respetuosa y personal posible”. El eje de la obra se basa en palabras pronunciadas por un coro de niños en mapudungun, lengua de pueblos originarios.

Por otro lado, la Orquesta Filarmónica también interpretará Dem Andenken eines Engels o A la memoria de un ángel, un concierto para violín de Alban Berg. En él, la intención del autor fue reflejar en melodías el sufrimiento y el dolor que causa la transición hacia la muerte de un ser querido.

Asimismo, el concierto Muerte y transfiguración, de Richard Strauss, representa la muerte de un artista. El autor y posteriores poetas que retoman su obra la describen con imágenes de pensamientos de su vida: la inocencia de su infancia, las luchas de su hombría, la consecución de sus metas mundanas y, al final, recibe la ansiada transfiguración “del alcance infinito de los cielos”.

Los músicos

Wolfgang David es un renombrado solista de diferentes emblemáticas orquestas del mundo, como la Royal Philharmonic Orchestra y la New York Virtuosi, entre otras. Ha ofrecido conciertos en más de 40 países, en destacados escenarios como el Musikverein y Konzerthaus de Viena, el Carnegie Hall en New York, el Wigmore Hall en Londres, Victoria Hall en Ginebra, Unesco Hall en París, el Teatro Bolshoi en Moscú y el Bunka Kaikan de Tokio.

Actualmente, realiza giras por Europa, Asia, Sur y Norteamérica de manera regular y es muy bien acogido por la prensa: el Washington Post escribió que él “escaló las cumbres de la interpretación musical”, y The Strad, una revista especializada del Reino Unido, describió su interpretación como “de un amplio rango emocional como sólo uno podría anhelar”.

La música contemporánea y el repertorio clásico-romántico son para él sus principales intereses. Fueron escritas para él más de 20 composiciones, entre ellas el Concierto para violín de David Gompper. Sus grabaciones en CD junto con la Royal Philharmonic Orchestra, bajo la dirección de Emmanuel Siffert, han sido aclamadas por la crítica. La American Record Guide describe la interpretación del violinista como “excepcionalmente rica, opulenta, desconcertantemente delicada y distante cuando es necesario”.

David hace sus presentaciones con un violín Carlo Bergonzi 1724, de Cremona, que le ha sido prestado en exclusiva por el Banco Nacional de Austria.

El Coro de Niños Cantores de Mendoza nació en 1956, bajo la batuta de Víctor Volpe, el profesor de música del Colegio Murialdo, quien expande la idea de abrirse fuera de la institución e incorporar más integrantes. El coro visitó Europa y su nombre fue cambiando de Niños Cantores de Murialdo a Niños Cantores de Mendoza, y así quedó establecido cuando cerraron su gira un año después en el Teatro Colón de Buenos Aires.

Hoy, el Coro Niños Cantores de Mendoza ya es un organismo oficial dependiente de la Secretaría de Cultura de la provincia. Está integrado en forma prioritaria por niños y niñas coreutas, alumnos de la Escuela de Niños Cantores y del Bachillerato Artístico Musical de Mendoza y, en menor medida, por alumnos de otras instituciones escolares.

Los objetivos del coro son rescatar y priorizar obras de autores y compositores mendocinos, argentinos, latinoamericanos, como también del repertorio universal, a través de actuaciones didácticas y pedagógicas, sinfónicas corales y conciertos en general y difundir la cultura coral y musical mendocina en el ámbito cultural regional, nacional e internacional.