El éxito de Jaguares en tierras neozelandesas dejó euforia y un cúmulo de satisfacciones individuales y grupales. La franquicia argentina ya está en territorio australiano, donde continuará la gira oceánica y donde querrá volver a pisar fuerte luego de vencer al poderoso Hurricanes, una de las potencias del Súper Rugby, pero las voces por tamaño éxito todavía resuenan.

“Fue una noche para el recuerdo. Esto es para que disfrute todo el rugby argentino y marca el esfuerzo de todos, desde los clubes hasta nosotros. Esto sigue y hay que tener claro que quedan cuatro partidos para cerrar esta etapa”, comentó Juan Fernández Miranda, asistente de Gonzalo Quesada.

Esa es también una de las sensaciones: que ahora hay que seguir, que no hay que dormirse en los laureles porque el triunfo en Wellington simboliza que el equipo está en condiciones de luchar de igual a igual con las potencias.

“Ojalá podamos seguir dándonos este tipo de alegrías. Hace unos años vine a ver a estos flacos con Hindú y metieron como 80 puntos. Creo que a partir de esta victoria van a adquirir una confianza que va a ser difícil de parar”, agregó el ex apertura.

Entre la satisfacción y la mira puesta en lo que viene se movieron los jugadores argentinos. “Sabíamos de lo que era capaz Hurricanes, por algo son el segundo más fuerte después de Crusaders -destaca Pablo Matera-. Son todos jugadorazos, pero nosotros miramos para adentro en lo que trabajamos. Estamos en el camino correcto. Vamos a ver qué se puede mejorar y jugar en Australia con la misma mentalidad de ganar”.

La de ayer fue una jornada de descanso para el plantel en la ciudad de Sydney, donde el grupo pasará la semana (volverá a tener libre el miércoles) antes de enfrentarse a Waratahs y donde planeará también el choque con los Reds, a jugarse en Queensland. Al finalizar la gira, será hora de volver a Buenos Aires para encarar los dos últimos juegos que pueden asegurar el pase a los playoffs por segundo año consecutivo: ante Sharks y Sunwolves en el estadio José Amalfitani.

“Sabemos que falta y somos muy exigentes con nosotros. Esa cultura de laburo y de ir siempre por más no las negociamos”, remarca el entrenador Quesada. Con esa mentalidad y la calma de saberse capaces pero sin enceguecerse, Jaguares irá en la búsqueda de seguir haciendo más historia en el Super Rugby.