A más de un mes y medio de la puesta en marcha, el Gobierno provincial compró 450 mil quintales. Ingresaron nuevas variedades de uva.
Aunque la temporada se retrasó por efectos climáticos, el mayor porcentaje de uva que vendieron los productores ya está en bodega y se espera que para la semana próxima ingrese un mínimo restante de 50 mil quintales.
La semana pasada, el registro de uva ingresada a las 21 bodegas inscriptas alcanzó los 450 mil quintales desde que comenzó el operativo. Una de las particularidades que se destacan es que en las primeras semanas la uva que llevaba los productores era cereza, criolla y moscatel y en el último tiempo, viraron a las variedades Pedro Giménez, Aconcagua, Patricias y Ugni blanc, debido a que los cambios de temperatura propiciaron la maduración de estas cepas.
Hasta el momento, en Mendoza Fiduciaria, sólo 200 productores han presentado la documentación por la venta de 100 mil quintales. Es decir que, si se calcula estimativamente por regla simple, al final del operativo serán alrededor de 900 los productores que vendieron su cosecha al Estado.
Cabe recordar que la compra de uva para mosto que encaró el Gobierno provincial para equilibrar el mercado interno y por consecuencia los precios de venta, tiene un presupuesto de $450 millones, dispuesto por Ley 9146, más conocida como Fondo Anticíclico Vitivinícola.
De este total, se estima que se ocuparán alrededor de $300 millones para la compra de 500 mil quintales. Es que el precio pagado al productor se estipuló en $5 más IVA por kilo, de contado, o $5,50 más IVA si la operación se financia en tres cuotas.
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