El fiscal Gustavo Stroppiana solicitó este viernes la detención de la monja Kumiko Kosaka por nuevos hechos que no habían sido tenidos en cuenta por el Tribunal, que este jueves le otorgó la libertad bajo el pago de una fianza de 2 millones de pesos.

En las últimas horas, a través de una apelación se desestimó el peligro de fuga y el riesgo procesal, por lo que la religiosa iba a esperar el debate por hechos de abuso sexual y corrupción de menores gozando de su libertad.

Sin embargo, con esta nueva disposición del magistrado que investiga los abusos sexuales en el Próvolo, la monja no podrá acceder a la libertad condicional, de acuerdo con fuentes judiciales.

En la audiencia que se celebró este jueves, la defensa de la religiosa consiguió que en algunos hechos que se le endilgaban las pruebas fueran cuestionadas para sostener la prisión preventiva. Sin embargo, en la elevación a juicio hubo otros casos que no fueron tenidos en cuenta en esta instancia.

Mientras se esperaba el inminente pago de la caución por dos millones de pesos, el Ministerio Público requirió que por seguir realizando investigaciones vinculadas a la causa siga presa.

La decisión de un tribunal de alzada que liberó a Kumiko generó una reacción de malestar y de nerviosismo en las víctimas y en los familiares.

Los involucrados en los abusos sexuales de la mega causa, todos están bajo la modalidad de la prisión preventiva y sólo en las causas de participación y omisión hay algunos que están en libertad.

En tanto, el próximo 8 de abril se reanuda la audiencia para definir la fecha de juicio contra los sacerdotes Nicola Corradi, Horacio Corbacho y el empleado Armando Gómez, acusados de perpetrar abusos sexuales contra los niños y jóvenes sordos del Próvolo.