El acuerdo-compromiso se alcanzó durante una reunión de urgencia convocada por el Ejecutivo, a la que asistieron gobernadores de nueve provincias, entre oficialistas y opositores PJ con la presencia de ministros, funcionarios y primeras espadas de Cambiemos en Diputados, después de la frustrada y accidentada sesión del jueves que se suspendió a propuesta de la diputada y cofundadora de la alianza de gobierno, Elisa Carrió.

El temario en cuestión que no pudo tratarse el jueves en el recinto debido al clima de agresiones entre los legisladores y los incidentes posteriores a la represión en la plaza de los Dos Congresos, incluye en tercer término el tratamiento de la reforma previsional que tiene sanción del Senado y que en su punto más polémico modifica desde marzo próximo la fórmula de la liquidación de haberes que está vigente.

Precisamente para compensar en parte la pérdida de haberes que tendrían los jubilados y beneficiarios de AUH en la primera liquidación con la fórmula nueva, en la reunión de ayer se acordó que una vez convertido en ley el proyecto, supuestamente el lunes próximo, habrá “un decreto que asegure un beneficio adicional”, precisó el comunicado en su tercer párrafo.

En principio la reunión se había previsto realizar en la Casa Rosada, con la presencia del jefe de Gabinete Marcos Peña, pero finalmente los gobernadores fueron convocados al Congreso y en representación del Ejecutivo participaron uno de los subjefes de Gabinete, Mario Quintana, junto a los ministros del Interior, Rogelio Frigerio y su par de Hacienda, Nicolás Dujovne.

El cambio de escenario habría respondido a la conveniencia política de circunscribir al Poder Legislativo y a una cuestión estrictamente de “números” un tema caliente que políticamente desde los hechos del jueves empezó a golpear sobre la administración de Mauricio Macri.

De la reunión, que duró casi tres horas, participaron nueve gobernadores (el mendocino Alfredo Cornejo, más los de Jujuy, Salta, Tierra del Fuego, Neuquén, Entre Ríos y Chaco), a los que sobre el final se sumaron los de la ciudad y la provincia de Buenos Aires.

También diputados de Cambiemos, como el radical Mario Negri y el macrista Nicolás Massot, y de 15 provincias, entre ellos el jefe del interbloque peronista Argentina Federal, el salteño Pablo Kosiner.

Fue éste justamente uno de los que no aportó al quórum el jueves, junto a otros del mismo interbloque que responde a los gobernadores PJ y cuya posición sobre la reforma previsional está atada a la fiscal.

El hecho de que una reforma está atada a la otra es el dato que encontró el Gobierno después de desechar sacar un decreto presidencial tras la derrota del jueves.

De ahí la convocatoria a los gobernadores a “cerrar filas” y la invitación, “si sus agendas lo permiten”, dijo Negri, a estar presentes en el inicio de la sesión del lunes.

A pedido de los peronistas, ya no será la Gendarmería la encargada de custodiar los alrededores del Congreso, sino que esa tarea la hará la Policía Metropolitana.

A Rossi no lo convence

El jefe de bloque de diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, sostuvo que “es poco claro” cómo se implementará el bono compensador para los jubilados y beneficiaros de la Asignación Universal por Hijo. Además, aseguró que “los efectos negativos de la reforma previsional se siguen manteniendo”.

“No tienen detalles porque no saben de qué se trata. Termina siendo regresivo para el sistema jubilatorio”, opinó Rossi. Al respecto, consideró que “si el bono se incorpora a la jubilación es una cosa; si no se incorpora, es otra peor”, y remarcó: «Lo que sigue siendo horrible es la movilidad que tienen por lo bajo”.

Lo sobresaliente

Quiénes recibirán el bono. La compensación llegará sólo a los jubilados y pensionados que cobren hasta 10.000 pesos y a los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo.

Cuándo se pagará. Será en marzo y por única vez, cuando se ponga en práctica el cambio de la forma de calcular los haberes de los jubilados.

Los jubilados que hayan aportado menos de treinta años o sin años de aporte recibirán un pago de 375 pesos.

Los beneficiarios de Asignación Universal por Hijo recibirán 400 pesos.

Los beneficiarios alcanzados. El dinero llegará a casi 4 millones de niños y 4,9 millones de jubilados y tendrá un costo para el fisco de unos 4 mil millones de pesos.