“Estamos agradecidos del enorme espaldarazo que nos han dado los mendocinos”. Con esa frase, el gobernador Alfredo Cornejo inició el festejo del contundente triunfo del frente Cambiemos/Cambia Mendoza en la elección legislativa.

Lo hizo en un ruidoso y repleto salón de un hotel céntrico. Y demostrando que más allá de los candidatos que integraron las listas, él es el principal ganador.

Con el resultado de ayer,  Claudia Najul, Luis Petri y Federico Zamarbide, con 45,67% de los votos, lograron el pase para ocupar una banca desde el próximo 10 de diciembre.

“Se entendió perfectamente el mensaje que queríamos dar”, dijo el Gobernador en otro párrafo de su discurso ganador.

Ese mensaje fue el de que se plebiscitaba su propia gestión. Por eso desde el principio él se puso la campaña al hombro. Y quizás también por eso fue el único orador en la noche del festejo.

“Debíamos plebiscitar la gestión, por lo que estamos haciendo y por lo que falta hacer”, señaló. Y remarcó su accionar en seguridad “con mano firme, la del sentido común, no la ideológica”. También resaltó la política educativa “con más recursos y tendiendo a mejorar la masividad y la calidad”. La de salud por la“mayor cobertura” y “una administración de justicia más ágil”.

Y si bien reconoció que hay “muchos problemas”, también habló de que “se irán mejorando poco a poco” y fue por eso que celebró el apoyo. “Los mendocinos saben que iremos mejorando todos estos temas y “de la política microeconómica y social”.

El triunfo de Cambiemos fue contundente porque le sacó 20 puntos al peronismo de Somos Mendoza, que quedó en un lejano segundo puesto.

También fue contundente porque mejoró en cinco puntos el resultado obtenido en las PASO de agosto.

De hecho, ganó departamentos que había perdido en esa primaria, como Tupungato y San Carlos (aunque no pudo ser así en Malargüe, donde  volvió a perder).

Pero lo fue más aún porque el frente de radical-macrista ganó en territorios peronistas clave. Así sucedió en San Martín, Maipú y hasta en San Rafael, donde -aunque haya sido por medio punto- le dio un duro cachetazo al principal candidato opositor, Omar Félix, ex intendente de ese departamento, ahora gobernado por su hermano Emir.

También festejó porque mantendrá la mayoría en la Legislatura provincial.

Es cierto que la elección arrojó algunas sorpresas. Como la del Partido Intransigente, que sirvió de plataforma para la ONG Protectora y colocó a José Luis Ramón en el Congreso al obtener 17% y  le arrebató el tercer puesto al FIT.

Pero en el cornejismo no se asombraron. “Le sacaron puntos al PJ”, decían. “Todas las fuerzas crecimos, menos ellos”, festejaban.

Los festejos de Cambiemos comenzaron temprano. El hecho de que sólo hubiera cuatro listas y escaso corte de boletas ayudó a que el escrutinio fuera rápido. Por eso, a escasos minutos de terminada la votación,  comenzaron a llegar las primeras “fotos” de las mesas vía whatsapp.

Los datos más mostrados eran los de Godoy Cruz y Capital. También Guaymallén y Luján. En todos, el oficialismo se imponía con holgura y el tradicional rival, el PJ, salía tercero y hasta cuarto en algunos casos.  A eso se sumaban los “sorprendentes” datos de San Martín y Maipú.

Esa fue la razón por la que funcionarios de primera línea aparecieron temprano en el búnker. “Estamos ganando en toda la provincia”, avisó a primera hora Rodolfo Suárez, intendente de Capital y presidente de la UCR.

“No podemos dar resultados, pero es una ‘tremenda’ elección”, dijo el ministro de Economía, Martín Kerchner.

“Me animo a decir que metimos tres diputados nacionales”, anunciaba Juan Carlos Jaliff. “En realidad ganamos una banca más”, aseguraba el senador.

Lo dijo porque si bien en 2013 la UCR también se quedó con tres de los cinco diputados, perdió uno cuando Julio Cobos pasó a ser senador nacional y fue reemplazado por Graciela Cousinet (Libres del Sur), aliada en Mendoza, pero opositora en el Congreso.

Una victoria como la de hace 12 años

Ni bien finalizada las PASO de agosto, Cornejo comenzó a remarcar el dato “histórico” por el triunfo oficialista en una elección de medio término.

Ayer volvió sobre ese argumento.

“Hace 20 años que a los oficialismos les cuesta ganar las elecciones de mitad de término. Los mendocinos han sido, desde 1997 a esta parte, muy prudentes y en general han votado a la oposición, dando más control a los oficialismos”, dijo Cornejo, en afán de resaltar aún más su triunfo de ayer.

Pero esa declaración tiene algunas salvedades y por eso él dice “en general”: en 2005, cuando gobernaba el radicalismo la provincia, con Julio Cobos como mandatario, el oficialismo también logró el triunfo.

En esa oportunidad la UCR, aliada a otras fuerzas, entre las que estaba el Partido Intransigente, logró más del 35% de los votos sobre el Frente para la Victoria (26,3%). Ese año, quien llegó al Congreso como diputado nacional fue, precisamente, Alfredo Cornejo.

Najul y Petri prometen trabajar por Mendoza

De los tres radicales que resultaron electos diputados nacionales sólo Claudia Najul y Luis Petri estuvieron en el búnker ganador. Federico Zamarbide se quedó en su San Rafael natal a festejar el triunfo allá.

Najul, que hoy retoma sus tareas como ministra de Salud, quiso mostrar su compromiso. “Vamos a armar con Luis y Federico un gran bloque para defender los intereses de la provincia”, señaló la funcionaria.

Además, le reconoció a Cornejo el liderazgo, aceptando incluso que ella misma haya quedado por debajo de la figura del mandatario en la campaña. “Somos parte de un equipo, de un proyecto para Mendoza y Alfredo es el líder de ese grupo”, indicó.

Por su lado, Petri se mostró satisfecho por el triunfo local y nacional. “Es un plus que nos da la población para seguir avanzando en las reformas para la provincia y el país en seguridad y en economía”, dijo.

También se esperanzó en trabajar “en conjunto” con la sorpresa de la elección, José Luis Ramón. “Es un Congreso de mucho diálogo. La idea se sumarlo en todo lo que sea positivo para Mendoza”, señaló.