El proceso de «despapelización» del sector público no sólo apunta a economizar sino también a agilizar los procesos. Los trabajadores cuentan con un portal propio con información personal y acceso a trámites y servicios.
Por su propia dinámica, la modernización del Estado no sólo está produciendo constantes cambios en la cultura del trabajo sino también significativos ahorros en el presupuesto provincial.
Si nos detenemos únicamente en el impacto del bono digital, es decir el sistema de expedición y distribución digital de los recibos de haberes de agentes y funcionarios estatales, el balance de lo realizado desde la implementación en enero de este año da un balance positivo en varios aspectos.
Entre enero y agosto de este año el ahorro alcanzado asciende a $547.402. En reducción de papel, el detalle indica que para la emisión de bonos de sueldo se utilizaban 1.455 resmas A4, con un costo mensual $165.346,20. A esto hay que sumarle 54 resmas para listados de uso interno y 383 resmas A3 para planillas de sueldos.
Al no licitarse el servicio de Impresión de bonos y planillas de sueldo, hasta agosto se habían ahorrado $240.000. En diciembre de 2016 se dio de baja al servicio de Distribución de Planillas y Bonos de Sueldo (DGE), lo que evitó el pago de $80.000 (a razón de $10.000 por mes).
Además de la esperable economía que conlleva su aplicación, el bono digital incorporó datos legales que la versión en papel no incluía, como CUIT del empleador y el neto a cobrar por el empleado en letras y números.
El subsecretario de Gestión Pública y Modernización del Estado, Ulpiano Suárez, hace su propio balance: «La implementación del bono de sueldo digital de los agentes y funcionarios es una acción concreta en el marco del nuevo modelo de gestión pública que lidera el gobernador Cornejo. Esta medida no sólo se encuadra en el proceso de modernización y despapelización de la administración pública que estamos realizando, sino que también refleja una adecuada utilización de los recursos del Estado. Además de impactar positivamente en la gestión de los recursos humanos, pues se incrementó significativamente el ingreso de los agentes al Portal del Trabajador Público».
Actulamente los archivos de legajos y bonos de sueldos en papel están en distintas ubicaciones en Casa de Gobierno, pero la idea es trasladarlos a la ex bodega Giol, en Maipú, donde también funciona el archivo judicial y se acopian documentos de la Dirección General de Escuelas.
Cambió el «chip» del empleado
Aún teniendo la posibilidad de imprimirse el bono de sueldo, los empleados públicos han tomado conciencia del beneficio ambiental que significa gastar menos papel y contar con sus haberes en formato digital.
En ese sentido, Suárez destacó el acompañamiento de trabajadores y gremios estatales ante esta política del Ejecutivo Provincial y la contribución con esta medida al cuidado del medio ambiente. Lo que no se tradujo en papel en lo que va del 2017 representa el equivalente a 120 árboles.
Con este nuevo formato, los empleados han incrementado notoriamente el uso del Portal del trabajador público, a tal punto que la cantidad de usuarios creció -de diciembre de 2016 a julio de 2017- de 36.560 a 68.137.
En sintonía con «la revolución de lo sencillo» que planteó Cornejo en su momento, el responsable de la modernización provincial reconoce que «con estas acciones sencillas que estamos concretando hacemos lo que hay que hacer. Por eso encaramos la modernización del Estado como un cambio cultural y como una oportunidad para avanzar hacia una administración cada día más ordenada, moderna y eficiente que permitirá brindar mejores servicios a los mendocinos».
Fuente:http://www.mdzol.com/nota/752300-el-bono-digital-ya-significa-un-ahorro-para-la-provincia/
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