La envergadura que tiene para las aseguradoras dar respuesta al riesgo climático en la provincia fue el punto esencial para que un conjunto de empresas se unieran en un consorcio y presentaran una propuesta económica única.

En el nuevo esquema, el productor seguirá aportando al Fondo Compensador Agrícola, mientras que el Estado provincial será el tomador del seguro que afrontará la compensación por contingencia. Es decir, será un esquema mixto en el que la parte pública y la privada administrarán la cobertura de riesgos.

El beneficio aplicará para productores de vid, frutales, hortalizas de verano y cereales forrajeros que, hasta el 31 de agosto, adhieran al sistema y, posteriormente, sus cultivos resulten afectados por causa de granizo o heladas. Las compensaciones o indemnizaciones del nuevo sistema, en caso de que haya pérdidas por granizo y/o helada del 100%, serán de $10.000 de base para vid, frutales y hortalizas de verano, y de $3.000 para cereales y forrajes. La póliza cubrirá hasta el 30% de los costos operativos de los productores que posean hasta 20 hectáreas, que hayan sufrido daños a partir del  50% del cultivo.

Según las estimaciones de la Dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas, más de 16 mil productores agropecuarios de la provincia quedarán amparados por el nuevo sistema de Seguro Agrícola.