Desestimaron la presentación de un bonista que reclamaba más de 23 millones de dólares de un remanente del canje del ex bono Aconcagua.
La Provincia celebra el fallo de la Justicia de Nueva York, que rechazó la demanda de un fondo “buitre” y por el que evitó tener que pagar más de 23,5 millones de dólares.
El juez neoyorkino Víctor Marrero rechazó la demanda que en marzo pasado hizo, contra Mendoza, Moishe Marcel Ajdler, tenedor de 7 millones de dólares, remanentes del ex bono Aconcagua, emitido en 1997 (Gobierno de Arturo Lafalla) por 250 millones de dólares, y a vencer en 2007.
Además, hizo lugar al pedido mendocino de “que se desestime” la demanda, dado que el período de reclamos había prescripto en 2011.
El bono Aconcagua se renegoció en 2004 con un plan canje que generó el bono Mendoza 2018.
Y si bien ese canje finalizó en 2008, quedó un remanente de 10,5 millones de dólares, que nunca fueron reclamados por ningún bonista.
Recién en agosto y noviembre del año pasado entró en escena Adjler, quien envió sendas advertencias al Gobierno de Alfredo Cornejo, reclamando una suma exacta de 7.050.000 dólares.
Las advertencias fueron consideradas un tema “menor” por la gestión cornejista, precisamente por entender que el reclamo había prescripto. Sin embargo, igual previó consecuencias.
Por eso, en diciembre pasado, cuando Cornejo viajó a Nueva York junto al entonces ministro de Hacienda, Martín Kerchner, en busca de inversores para la provincia, se hizo contacto con cinco estudios de abogados neoyorkinos.
Los encargados de esa tarea fueron el entonces subsecretario de Financiamiento (hoy titular en Hacienda) Lisandro Nieri, y el fiscal de Estado, Fernando Simón.
“La idea es abrir el paraguas por si alguien demanda”, contaba en aquellos días el fiscal Simón a Los Andes.
La demanda se hizo efectiva en marzo de este año. A los más de 7 millones originales reclamados por Adjler, sus abogados le añadieron los intereses, entre otros ítems, lo que llevó la suma a exactamente, 23.570.206,25 dólares.
Mendoza contrató entonces a Cleary, Gottlieb Steen & Hamilton (decreto 547 del 24 de mayo de 2017). Se trata del mismo estudio neoyorkino que representó al Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en los tiempos de su lucha contra los fondos “buitre”.
Fue este estudio el que ayer hizo llegar a los mendocinos, la buena nueva del fallo favorable.
Diferencia con la era K
Está claro que el fallo de Marrero es apelable, pero tanto Simón como Nieri se esperanzaron en que eso no ocurra. No porque Adjler desista de su reclamo, sino porque los argumentos del juez “son contundentes”, consideraron ambos.
Los abogados de Adjler habían aludido a los casos de los “holdouts” que en 2014 ganaron la batalla judicial a la Argentina, que en aquel tiempo se mantenía en default con esos fondos de inversión.
Su idea era aplicar el criterio “pari passu”, es decir, tratamiento igualitario para todos los acreedores del país.
Pero en su sentencia, Marrero consideró que el comportamiento de Mendoza fue distinto a la que tuvo el país cuando lo gobernaba Cristina Fernández. Cabe recordar que en ese tiempo, Argentina se negaba a negociar un acuerdo de pago con esos fondos, contrario a lo que dos años después sí accedió la gestión de Mauricio Macri.
Según el juez, ahora “no se da la conducta que tuvo el Estado argentino”, en aquella oportunidad.
Pero demás, tanto en los términos de la Justicia neoyorkina, como en las cláusulas del propio contrato del canje que generó Mendoza, prescribieron los tiempos: seis años en el caso de la primera, cuatro en el segundo.
Es cierto que todavía restan otros 3,5 millones del remanente del canje vencido hace diez años.
Es cierto también que existe la posibilidad de que haya otros bonistas, los que podrían hacer nuevos reclamos.
Pero los funcionarios locales se mostraron optimistas de cara al futuro. “Esto nos pone en una muy buena posición”, señaló el fiscal de Estado.
“Éste es un buen antecedente para dar un punto final al tema”, concluyó, con satisfacción, el ministro Nieri.
Cronología
1997. El gobernador Arturo Lafalla (PJ) emite el bono Aconcagua por 250 millones de dólares, a vencer en 2007.
2004. El gobernador Julio Cobos (UCR) reestructura la deuda con un canje al bono Mendoza 18, a vencer en 2018.
2008. Finaliza el canje del Mendoza 2018. Remanente de 10,5 millones de dólares.
Agosto y noviembre 2016. En dos cartas, Moishe Adjler reclama más de 7 millones de dólares de ese remanente.
Diciembre 2016. En Nueva York, Alfredo Cornejo (UCR) considera “prescripto” cualquier reclamo del remanente.
Marzo 2017. Adjler demanda a Mendoza por 23 millones de dólares.
Agosto 2017. El juez Marrero desestima la demanda y falla a favor de Mendoza.
Fuente:http://losandes.com.ar/article/mendoza-le-gano-a-un-fondo-buitre
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