La Dirección General de Escuelas (DGE), a través de la Resolución ministerial 1099, declaró de Interés Educativo para la Provincia el nuevo manual de Defensa Civil, que estaba en vigencia y desde 1972 no se había actualizado. Además, el Ministerio de Salud revisó los contenidos de primeros auxilios incluidos en la publicación.

La elaboración de este material pedagógico para los docentes es, en el corto plazo, instruirlos para incorporar material a sus currículas, mientras que a largo plazo es preparar a la sociedad, desde la infancia, en materia de prevención y autocuidado.

Actualmente, el proyecto está en la etapa de aprobación legislativa y una vez que esté finalizado este procedimiento, se podrá imprimir y repartir a los titulares con cursos a cargo.

Con esta herramienta, los docentes y todo el personal involucrado en los establecimientos educativos deberán capacitarse para enfrentar de manera óptima las distintas emergencias naturales y/o entrópicas. No sólo para saber cómo actuar frente a las distintas amenazas sino también para poder volcar contenidos y actividades en las currículas de las materias.

El docente se capacitará a través de un aula virtual que se implementará, en la que el profesional deberá tener un porcentaje de asistencia (12 no presenciales y 6 presenciales) y se le otorgará puntaje.

El manual está dividido por temas. El primer capítulo se refiere al objetivo de la Defensa Civil, su organigrama y actuación, mientras que en el segundo hace referencia al vocabulario que es imprescindible conocer para responder ágilmente a la emergencia. Posteriormente se explica cómo el establecimiento educativo debe elaborar un plan escolar para responder a una crisis, detallando el rol que debe tener integrante de la población educativa.

Se han incluido capítulos que abordan las distintas emergencias que pueden ocurrir en Mendoza, entre ellas inundaciones, viento zonda, tormentas, rayo, terremoto y sismo. En cada caso se plantea la educación para cada situación analizando cómo se producen, por qué, qué medidas se deben adoptar antes, durante y después. También se plantean los distintos escenarios: si es invierno o verano, si es dentro o fuera del hogar.

Otro ítem importante es la señalización que deben tener las escuelas y el procedimiento de evacuación ante un desastre.