Las cifras causan impacto. Solamente en la sede central de Irrigación, donde trabajan 330 personas, se han utilizado mensualmente 5 mil vasos térmicos descartables para tomar infusiones y agua. A esto se suman las dependencias del organismo en toda la provincia, lo cual ha llevado a un gasto mensual de 6 mil pesos.

El Superintendente General de Irrigación, Sergio Marinelli, tiene como principales patas de su gestión la “eficiencia, transparencia y austeridad”. Ésto último implica reducir costos, por lo que la acción ambientalista de los vasos es, también, una de las tantas medidas de la nueva gestión para ahorrar.

Desde este jueves, todo el personal de la institución (sede central y subdelegaciones) cuenta con una taza de cerámica con el logo de Irrigación y cada trabajador podrá ocurparla durante su jornada laboral. De esta manera, el uso de vasos descartables se elimina.

Con esta medida, y según comentó la directora de Finanzas de Irrigación, Susana Chamizo, “Irrigación ahorrará alrededor de 6 mil pesos mensuales y 72 mil pesos anuales, que hasta hace poco destinábamos a la compra de estos insumos”.

“Bajo las premisas de ayudar al medio ambiente y reducir costos, es que creemos que esta acción de entregar a todo el personal tazas de cerámica para que puedan utilizar en el organismo será muy útil además de importante. Es la primera de una serie de acciones que vamos a ir implementando próximamente como el uso de luminaria de bajo consumo y led, y la reducción en el consumo de combustible de los vehículos de Irrigación”, aseguró Edgardo Juárez, Director de Gestión Institucional.

Cuidar el dinero que aportan los regantes

Ya en el acto de asunción, Marinelli declaró que durante su gestión una de las líneas de trabajo importantes sería la de reducir costos para destinar la mayor cantidad de dinero aportado por los regantes,a la realización de obras, que vuelvan más eficiente el sistema de distribución de agua. A su vez, en vista a la celebración del Día del Amigo, este 20 de julio fue el elegido para entregar las tazas como un presente institucional.