La primera vuelta de las elecciones franceses está a la vuelta de la esquina y tendrán lugar en abril. Por esa razón, Google y Facebook se han puesto las pilas y ya trabajan para frentar un fenómeno reciente, pero muy grave: las noticias falsas que fluyen libremente por sus plataformas y tienen un impacto muy importante.

Al margen del papel que pudieran o no jugar en la elección de Donald Trump en las elecciones presidenciales de EEUU de noviembre, ambas compañías quieren evitar cualquier culpa sobre el resultado de las elecciones francesas.

Por ello, se han asociado con First Draft News, una organización periodística sin ánimo de lucro, para desarrollar CrossCheck, que se ha puesto como misión desarrollar unas herramientas de desarrollo y que permitan detectar yu verificar informaciones que se publican en Internet con el objetivo de determinar si son falsas o sus contenidos tienen un origen veraz.

«CrossCheck une la experiencia de los medios de comunicación y de las industrias tecnológicas para asegurarse de que rumores, montajes y declaraciones falsas se tiran por tierra rápidamente con hechos, del mismo modo que otras informaciones engañosas se publican de la forma adecuada», comentan en su web.

Las herramientas y los métodos empleados tanto por Facebook como por Google varían según su función, pero una de las más interesantes es CrowdTangle, que descubre rápidamente y monitoriza contenido relevante para las elecciones, de modo que si algo falso se empieza a extender por redes sociales, se pueda señalar antes de que se convierta en algo masivo.

Junto con las dos gigantes tecnológicas, hay 17 medios franceses asociados, como la agencia AFP, Le Monde o BuzzFeed News. La eficacia de esta propuesta tendrá que demostrarse durante los próximos meses, así como hasta qué punto puede afectar a la opinión pública.