La Subsecretaria de Desarrollo Social, Marcela Fernández, junto a la Directora de Género y Diversidad (DGD), Silvina Anfuso, presentaron los datos elaborados a partir del Registro Único de Casos (RUC) en el marco del Observatorio de  la DGD.  

La presentación del informe se realizó en el Centro Regional de Hemoterapia, ubicado en calle Montecaseros, de Ciudad. Concurrieron al acto Stella Spezia,  directora de la Mujer de la Suprema Corte de Justicia; Daniela García y Ernesto Mancinelli, senadores provinciales; Adriana Bertolotti, Ministerio de Seguridad; Fernanda Bernabé, coordinadora del Área de Planificación, Seguimiento y Evaluación de la Universidad Nacional de Cuyo; Eva Rodríguez Agüero, Secretaria General del Instituto de Estudios de Género y Mujeres (IDEGEM). Además asistieron referentes de la Dirección de Promoción y Protección de derechos de la DINAF y de las áreas mujer municipales.

“La idea de la presentación de estos datos, que si bien son parciales, tiene que ver con esta política que desde el Gobierno se está impulsando con respecto a la problemática de la violencia de género”, expresó Marcela Fernández. Y agregó: “Estamos en un momento en el que contamos con los dispositivos georefenciales, la descentralización de fondos a los municipios, el programa Nuevas Redes que posibilita la asistencia directa a las mujeres, la apertura de nuevos refugios, entre  otras medidas y en ese sentido, necesitamos contar con datos concretos para definir los lineamientos de acción”.

“Tenemos que ser certeros en la recolección de datos, para generar tantos dispositivos como indicadores se presenten. Por eso también es importante las instituciones que se han hechos presente para trabajar en la unificación de criterios con respecto a la toma de datos estadísticos”, continuó Fernández. Destacó además que el Ejecutivo se ha comprometido a publicar cada tres meses estos datos, “lo que significa también una medida de control para que se observen las medidas que se toman desde el Ejecutivo y para dar muestras a la sociedad de la trasparencia que queremos dar”.

Por su parte, Silvina Anfuso señaló: “Este año hemos logrado que la totalidad de la provincia pueda registrar los casos de violencia de género en las áreas psicosociales. Vamos a hacer la presentación con los datos cualitativos pudiendo desagregar cuáles son las edades, las características de la vivienda, cuál es la relación con el agresor, si ha habido o no medidas judiciales y vamos a aprovechar esta oportunidad que nos reunimos con gente del Ministerio Público, de la Corte y de la UNCuyo, para ya delinear cómo uniformar los criterios para el año que viene, cosa que los datos que recopilen desde la Justicia se ensamblen con los de la provincia y que de alguna manera respondan a los criterios que vienen estableciendo desde el Indec para poder tener un registro único nacional”.

Con respecto a los datos obtenidos, la funcionaria evaluó: “Vemos que hasta ahora la relación tiene que ver con la población, pero nos queda como desafío el tema de registrar la población rural. En relación al año pasado hubo un incremento pero tiene que ver con la visibilización de lo que ocurre”.

Los datos de Registro Único de Casos

El Registro Único de Casos es un instrumento diseñado e implementado por la DGD con el objeto de registrar la situación de mujeres que transitan situaciones de violencia doméstica.

Según los datos registrados hasta el momento, hay 2.128 casos de mujeres en situación de violencia asentadas en el RUC, entre enero y noviembre de 2016. El 63% comprometió a mujeres entre 25 y 44 años, y los agresores casualmente mantienen el mismo porcentaje y la misma edad. Casi el 45% de ellos son la pareja actual y el 40% son la ex-pareja, mientras que el 15% son padres, hermanos, hijos, entre otras relaciones. El 50% de las mujeres comparten vivienda y casi la otra mitad (44%) no viven bajo el mismo techo.

En este sentido, Anfuso expresó: “Pensando en las políticas públicas, aparece que un 5% requiere algún hogar transitorio, por ello vamos a ver la posibilidad de la construcción de nuevos refugios y a su vez avanzar en políticas de vivienda con el IPV, ya que aparece que el 85% de las mujeres tienen precarización laboral y de esas un 50% tienen problemas con la vivienda”.

El informe se ha elaborado teniendo en cuenta las limitaciones metodológicas que significa tener claro que el mismo “no representa la totalidad de los casos de violencia doméstica de la provincia” ni tampoco la “totalidad de los casos de situaciones que han sido abordadas”. No obstante ello el mismo sirve como aproximación a la determinación de las situaciones u hechos que se presentan con mayor frecuencia en el universo de casos cargados.

Otros datos destacados, indican el impacto de la situación de violencia en la salud de la mujer y el acceso a la Justicia. Sobre este aspecto se detecta que el  82% de los casos no cuenta con obra social y que el 62% de los casos tuvo intervención previa de la Justicia Civil y 71% de los casos tuvo intervención previa de la Justicia Penal/ Ministerio Público.

Con respecto a los tipos de violencia ejercida por el agresor, el 62 % es psicológica, 51 % física, 29 %económica y 13% sexual.

Además, se avanzó en la conformación Consejo Consultivo  (art. 6 de la Ley Nro. 8808) integrado por representantes de Legisladores/as de cada bloque,  Comisión de Género de la Legislatura, Secretaría de Políticas Púbicas y Planificación  de la UNCuyo y el IDEGEM , Ministerio de Seguridad, Suprema Corte de Justicia y Ministerio Púbico,  organizaciones estatales y no estales con personería jurídica.

“El consejo consultivo va a funcionar trimestralmente entre los tres poderes. Hoy vamos a aunar criterios sobre qué vamos a analizar, y cuáles son los datos que necesitamos, van a participar todas las instituciones de la sociedad civil que va a publicar cada tres mesas los datos y monitoreando para perfeccionar las políticas públicas”, finalizó Anfuso.

Finalmente, representantes de los tres poderes, UNCUyo, áreas mujer municipal y organismos vinculados a la temática se reunirán el próximo 15 de febrero para avanzar en los acuerdos.