En esa nota, damos sólo cuatro ejemplos de esta realidad.
PAL – V
El nombre técnico debe encuadrarse dentro de los «autogiro». Posee dos plazas y cuenta con un rotor principal que le permite sustentarse en el aire, similar al concepto de un helicóptero y un motor que culmina en una hélice que le da el avance. Su peso vacío es de 665 kg y con carga máxima asciende a los 910 kg. Tiene una potencia de 200 hp, mide 4 mts de largo, 2 de ancho y 1.6 de alto. En tierra alcanza los 170 km/h. Los 0-100 los logra en 10 segundos, consume 12 km por litro y el rango de alcance es de 1200 km con un tanque. En vuelo, sus prestaciones son también interesantes: la velocidad de crucero es de 180 km/h, tiene una velocidad de pérdida (esto es la velocidad mínima para sustentarse y no caer) de 50 km/h. despega en sólo 165 metros mientras que para aterrizar necesita de apenas 30 metros. En el aire consume 28 litros por hora de vuelo y el rango de alcance oscila (dependiendo de las condiciones) entre 350 y 400 km.
TERRAFUGIA TRANSITION
Este modelo está encuadrado dentro los aviones ultralivianos experimentales. Construido en fibra de carbono, posee dos plazas y sus puertas de acceso. La planta propulsora es un Rotax 912S de 4 cilindros de 100 hp. En vuelo el empuje está dado por una hélice mientras que en tierra la transmisión se dirige hacia las 4 ruedas. Su caja es automática variable. El combustible no es problema; consume nafta de 95 octanos, así que en cualquier estación se puede llenar el tanque y pedirle al playero que repase el parabrisas con la debida propina para el trabajador. En vuelo su velocidad máxima es de 185 km/h pero en tierra es lento, no supera los 105 km/h. Posee un sistema de plegado y extensión de las alas que se realiza en 30 segundos. En modo auto, mide 2 metros de alto, 6 de largo y 2.6 de ancho. Con sus alas extendidas la envergadura es de 8 metros. Para decolar precisa algo más de 500 metros. Su peso vacío es de 440 kg y con sus tripulantes el máximo permitido es de 650 kg. Entre el equipamiento de seguridad tiene airbag y un paracaídas balístico que se activa si surge una emergencia. Su valor oscila los 280 mil dólares.
THE MAVERICK
Para los memoriosos «Maverick» era el nombre del personaje de Tom Cruise en Top Gun. Pero el que presentamos en esta sección tiene un propósito antibélico, una verdadera tentación para los amantes de la aventura. Es un modelo biplaza en tándem (en lugar de ir lado a lado, piloto y pasajero van uno detrás del otro). Podemos encuadrarlo dentro de lo que en argentina llamamos Paramotores (parapente más motor). Es precisamente una vela la que sostiene al Maverick. Las costillas de dicha vela hacen que el aire ingrese y egrese inflándose y generando la sustentación. Su motor es un Subaru EJ22 de 140 hp propulsado por una hélice de cinco palas. Para alcanzar los 0-100 km/h precisa 6 segundos y su velocidad final es de 145 km/h. Para despegar necesita alcanzar los 64 km/h en un carreteo aproximado de 90 metros. Su vuelo es suave y lento, cumpliendo el propósito de su creación: la aventura y el deseo de volar. Sólo 12 hs de instrucción alcanzan para lanzarse a disfrutar por ejemplo de zonas costeras o agrestes, eso sí, el viento es una limitante ya que determina su capacidad operativa.
AEROMOVILE 3.0
Es quizá la máxima expresión de la tecnología en su género. Se trata de un biplaza lado a lado, su esqueleto es de aluminio y fibra de carbono y pesa 450 kg. Con sus alas plegadas mide 2.24 mts de ancho por 6 de largo. El motor es el mismo que utiliza el TERRAFUGIA TRANSITION, el rotax 912 que se alimenta de nafta de 95 octanos. En vuelo posee una autonomía de 700 km consumiendo 15 litros por hora. Su velocidad crucero ronda los 200 km/h mientras que para despegar requiere alcanzar los 130 km/h. En tierra la autonomía es de 875 km y consume 8 litros por cada 100 km. La sofisticación de este modelo – que se pondrá a la venta a partir de 2017 – incluye la posibilidad de modificar el ángulo de ataque de las alas que optimiza los requerimientos al despegue, su suspensión versátil le permite además decolar y aterrizar en pistas de césped.
Llegamos al final de nuestra hora de vuelo en este espacio de Autos. Aquellas personas que deseen animarse a disfrutar de estos modelos, precisarán el dinero para darse este gusto caro por cierto y tener paciencia a que con el paso del tiempo se construya la reglamentación necesaria. Para volar, en argentina sólo se podría utilizar en aeródromos y zonas no controladas. Deberán también contar con la certificación de la dirección nacional de aeronavegabilidad. Mientras tanto se puede disfrutar del video de esta nota que muestra otro sueño del hombre en sus ansias de volar.
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